La patronal rebelde de pymes intensifica en Bruselas su asalto a CEOE
El presidente de las pymes catalanas e impulsor de Conpymes, Antoni Cañete, está en Bruselas para ser nombrado vicepresidente de SME United
Antoni Cañete, presidente de la patronal catalana de pequeñas y medianas empresas Pimec e impulsor, y vicepresidente, de Conpymes, organización que quiere disputar la representatividad a CEOE, aterrizaba este miércoles por la noche en Bruselas. El motivo es que este jueves toma posesión como vicepresidente de SME United, la patronal europea de pymes.
El acto podría parecer de trámite pues Pimec ya tenía esa silla, que hasta ahora ocupaba aun Josep González. Pero no es así. El líder de las pymes catalanas es ambicioso y perseverante, y su gran objetivo actualmente es que Conpymes, un proyecto más suyo que de ningún otro de sus integrantes, consiga la representatividad de las pymes en el diálogo social en España, plantando cara a CEOE. Sin duda, lograrlo es uno de los usos que quiere dar a su nuevo cargo a nivel comunitario.
Cañete no esconde que su objetivo es estar en igualdad de condiciones con la patronal que preside Antonio Garamendi en las mesas de negociación con el Gobierno. Lo ha pedido formalmente y se le ha denegado, pero el asunto está en los tribunales y lo luchará. No hay novedades en los juzgados, aseguran fuentes de Pimec, pero sabe que la batalla debe jugarla también en Europa.
El presidente de Pimec ya lo consiguió en Cataluña, donde pasó de tener el 25% al 50% de la representatividad, si bien él en ese momento era secretario general de la organización. Logró, de rebote, que Josep Sánchez Llibre cerrara Fepime, la patronal de pymes de Foment que Juan Rosell había creado precisamente para competir con Pimec.
En Madrid también saben lo insistente que puede llegar a ser a. Allí se hizo conocido en los círculos empresariales y políticos, hace ya más de una década, como presidente de la Plataforma Multisectorial Contra la Morosidad, que logró que el Congreso redujera los plazos de pago a proveedores y sancionara su incumplimiento, pues el mismo iba a menudo en detrimento de las pymes.
La batalla con CEOE pasa por Bruselas
Con su firma en estos logros, es fácil imaginar que no se rendirá fácilmente. Y Bruselas es un escenario ideal porque en la UE ya existe esa representatividad de la pyme, precisamente con SME United. Pero además, uno de los argumentos que usa tanto Cañete como José María Torres, presidente de Conpymes, es que es un paso “necesario” para la “democratización” del diálogo social, algo que “saben en Europa”.
En julio, Cañete aseguró en una entrevista en Economía Digital: «Iremos a donde haga falta, incluso a nivel europeo. Desde un punto de vista democrático, el hecho de que las pymes no tengan voz propia en el diálogo social es una anomalía muy grave».
Esta idea parece estar calando también en España. Pese a que de momento no parecen cerca de conseguirlo, en 2023 podría haber cambios. Yolanda Díaz se ha mostrado cercana a Conpymes y, de hecho, estuvo en la presentación de la patronal en mayo del año pasado, también con Begoña Gómez, esposa de Pedro Sánchez, con quien la cúpula de la organización tiene una buena relación.
Conpymes cuenta ya con una treintena de socios, entre los que se encuentran la mayor patronal de transportistas, Fenadismer, una de las grandes del sector agrario, COAG, los autónomos de UATAE, los productores de fotovoltaica, las pymes de Baleares o la unión de gremios de la Comunidad Valenciana, además de Pimec.