La pandemia cambia la forma de viajar: el coche gana al avión para evitar la PCR
El "rent a car" se convierte en uno de los productos estrellas en España ante el aumento del turismo nacional, sobre todo en las islas
Las empresas de alquiler de coches fueron de las más perjudicadas en 2020 por la pandemia. La falta de turistas extranjeros, muy dependientes de este servicio sobre todo en las islas, fue el detonante. Pero el escenario para el sector del Rent a Car es muy diferente para este 2021.
La incertidumbre sobre si se necesitará estar vacunado para viajar al extranjero, las cuarentenas, los test y las pruebas PCR para poder volar, han hecho que los viajeros apuesten por el turismo de proximidad y en consecuencia se estén alquilando más coches. La otra cara de la moneda es que se están vendiendo menos billetes de avión.
En el conjunto del año pasado, el alquiler de coches cayó un 75% respecto a 2019 según datos de la Federación Nacional de Vehículos de Alquiler (Feneval). Pero para este ejercicio el escenario es más esperanzador porque desde que finalizó el estado de alarma, la demanda se ha disparado. El sector prevé un mejor comportamiento que en 2020, aunque destacan que para llegar a los niveles de 2019 aun queda camino por andar.
Desde Destinia coinciden con estos datos. El año pasado el alquiler de coches cayó un 63% en términos generales, mientras que la caída de vuelos fue de un 57%. Ahora bien, el comportamiento dentro de España fue mucho mejor. Los vuelos cayeron un 65% mientras los coches solo cayeron un 55%, sobre todo por los alquileres en islas que dependen muchos del cliente internacional. No obstante, en agosto consiguieron cerrar con una caída del 26% comparada con 2019.
El director general de esta agencia de viajes online, Ricardo Fernández, explica en una entrevista en Economía Digital que desde que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, dijo el 7 de abril que no postergaría el estado de alarma más allá del 9 de mayo, se dispararon las reservas de viajes para este verano. Y lo que más le sorprende es que en la primera quincena de mayo se han vendido un 6% de reservas de coches que en todo abril. “Creemos que puede ser uno de los productos estrellas en España”, comenta.
Al tiempo, las ventas de vuelos han crecido un 4,3% mientras que las reservas de hotel lo han hecho en un 32,5%. Y todo esto tiene una explicación, comenta. Por una parte influye que todavía hay muchas rutas que no se han abierto, y esto está haciendo que los españoles apuesten por el turismo de proximidad, el nacional.
Es decir, se van a mover más por carretera tanto en la península como en las islas y por ello, los coches y los hoteles son lo que más se están vendiendo, señala. Por otra parte, el mercado que más está reservando en España es el francés, sobre todo en Cataluña, pero la llegada no es por aire, sino por tierra.
“Es perfecto para ellos porque pueden venir en coche, están evitando coger un avión por la incertidumbre de si necesitarán vacuna o prueba PCR”. En Portugal está ocurriendo lo mismo pero a la inversa, actualmente el Algarve, Lisboa y Oporto son los tres destinos internacionales que más han reservado los españoles para las vacaciones de verano, y la razón principal, de nuevo, es que pueden ir en coche.
El de Destinia insiste en que hasta 2019, el 82% de todos los viajeros internacionales que venían a España lo hacían por avión, pero ahora el escenario es muy diferente, gana el turismo de cercanía y no solo en nuestro país. La tendencia es global.
En la misma línea, el director financiero de eDreams ODIGEO, David Elizaga, comenta en una entrevista con ED que los vecinos del sur como Francia, Italia o Portugal, que disponen también de destinos de sol y playa asociados al verano, registran un mayor interés por destinos nacionales como Córcega, Cerdeña o Madeira, respectivamente.
El turismo post pandemia se abrirá a la diversidad de destinos
Desde el sector comparten que el turismo post pandemia se parecerá mucho al pre pandemia, los hábitos no van a cambiar, pero si habrá una mayor diversificación de destinos. Antes el 80% de los viajeros españoles iban a los mismos 30 destinos, por ejemplo, el favorito en nuestro país es el Caribe.
Pero ahora descuentan que la demanda será más variada. “En este tiempo muchos han descubierto el turismo de naturaleza, el cultural… y es muy bueno para la industria porque permitirá ofrecer productos más complejos que incluyan transporte en avión, tren y coche” declara el de Destinia.
Ambos coinciden en que este verano será mucho mejor que el de 2020. “Tenemos la certeza de que el sector se recuperará más pronto que tarde”, señala Elizaga. En su opinión, los consumidores nunca han abandonado el deseo de viajar, sino que llevan posponiéndolo durante todos meses para materializarlo en cuanto la situación lo permita.
Si los planes de vacunación siguen su curso, en los próximos meses contaremos con un 70% de la población inmunizada, “por lo que cada día vemos la recuperación de los viajes un poco más cerca”, añade.
El director general de Destinia asegura que a nivel global están ya en niveles pre covid, y en las últimas tres semanas han vendido más que en 2019, pero no esperan una recuperación total hasta 2022.
Una de las principales razones que está animando a los españoles a preparar las maletas es que los precios son muy competitivos, el ticket medio de las últimas dos semanas es más bajo que en 2019.
«El precio de los hoteles en julio está un 26% más barato que antes de la crisis»
Por ejemplo, para el mes de julio los hoteles en España están un 26% más baratos que el año antes de la crisis, están pidiendo por noche una media de 104 euros frente a los 142 que costaba en 2019. A ello se suma que todavía muchos hoteles permanecerán cerrados hasta que empiece la temporada alta y cuando decidan abrir, habrá más oferta y también caerán los precios.
En Destinia asumen que en la temporada de verano no llegarán al 100% de ventas, pues al menos esperan un 25% de pérdidas asociadas al turismo extranjero que no podrá venir. En eDreams se preparan para maximizar la elevada demanda que se prevé para cuando España alcance la tan esperada “inmunidad de rebaño” y se acerque a la nueva normalidad.