La moda Lomography resiste a la era digital
La marca factura más de un millón en España en sus tiendas y en Internet
La mítica marca Lomography ha conseguido resistir en plena era digital y ha recuperado el tirón de las cámaras analógicas y del desterrado uso de los carretes. La fotografía artística experimental que comercializa esta compañía creada en la década de los 90 se ha hecho un hueco entre los clientes más jóvenes.
La empresa llegó a España hace 16 años. Y cuenta con tres tiendas: dos en Madrid y una en el barrio barcelonés del Born. Aunque para el actual estandarte de la fotografía analógica tan sólo trabajan siete empleados en el país.
Entre los tres locales, distribución y la página web, la firma facturó 1,2 millones en 2012. La cifra se ha mantenido estable en los tres últimos años pese a la crisis.
Nuevo público
Y aunque se trata de una marca de cámaras que está volviendo a darse a conocer en España, el embajador de la firma, Pasquale Caprile, asegura que Lomography “no tiene previsto abrir más tiendas”.
El mercado español fue una de las primeras apuestas de Lomography a nivel internacional. Los dos primeros establecimientos físicos se abrieron casi al mismo tiempo en Viena, ciudad de origen, y Madrid.
Mercado español
Capriles asegura que si Lomograpgy apostó por Madrid y Barcelona fue porque representan dos potentes mercados en el mundo de la fotografía. Especialmente en el ámbito artístico.
La firma sigue a flote después de ser ‘redescubierta’ por “la generación del pixel”, tal y como define Capriles a los usuarios con edades comprendidas los 18 y los 25 años. El representante español destaca que gracias a las redes sociales ha conseguido llegar a un público al que antes era muy difícil acceder.