La mayor red de cajeros del mundo pide paso a Caixabank, BBVA, Santander y Sabadell
El director de Cardtronics en España explica en una entrevista con Economía Digital las sinergias y reducción de costes que consigue la banca al unirse a su red
Cardtronics, el mayor propietario de cajeros automáticos del mundo, quiere que Caixabank, Banco Santander, BBVA y Banc Sabadell se unan a su red, a la que ya pertenecen casi la totalidad de la banca española.
La empresa cuenta con 300.000 cajeros propios a nivel mundial, 1.000 de ellos en España bajo su marca Cashzone. Pero su alianza con 27 bancos permite el acceso al efectivo a 15 millones de personas en nuestro país.
El director general de la compañía en España, Jimmy Tarazona, revela en una entrevista con Economía Digital por qué la alianza con los cuatro bancos españoles más grandes (que suman más de 30.000 cajeros) sería una oportunidad para el sector en un momento de transformación donde se ha acelerado el cierre de oficinas y ha aumentado la digitalización.
Cardtronics aterrizó en España en 2017 y ya tienen acuerdos con la inmensa mayoría de bancos españoles, permitiendo a sus clientes tener acceso a su red de cajeros con acuerdos preferentes, como sacar dinero gratis o con una comisión mínima.
El momento era clave. Poco tiempo antes, en 2015, Caixabank tomó la decisión de cargar una comisión fija de dos euros a los no clientes que sacaran dinero de sus cajeros. Después, las grandes redes españolas de cajeros automáticos (Servired, 4B y Euro 6000) se fusionaron.
La guerra de cajeros era oficial y tuvo que intervenir el Banco de España mediante Real Decreto. En este se estableció que la comisión la asumieran las entidades y luego, cada banco emisor de la tarjeta decidiera si repercute al cliente final o no.
De esta manera, se estableció que lo máximo que se puede cargar al cliente es la tasa acordada, pero también puede ser menos o incluso gratis. “Por ejemplo, nosotros cobramos 55 céntimos a Bankinter cada vez que uno de sus clientes retira efectivo en nuestra red de cajeros, pero ellos han decidido que este servicio sea gratis y no repercutirlo al cliente”, explica Tarazona.
El director de Cardtronics España se muestra convencido de que, si los cuatro bancos más grandes en nuestro país se unieran a su red, abaratarías costes y se crearían sinergias. Primero, porque no necesitarían contar con una red propia tan grande, segundo porque llegarían a zonas donde ahora no están presentes y tercero, porque beneficiarían aún más al cliente, a quienes se les ofrecería este servicio sin coste.
“La puerta no está cerrada, se sigue negociando”, comenta. El objetivo es que migren de un modelo de un cajero previo al Real Decreto donde era “tú cliente y tú cajero” a un moldeo global que atienda a todos los bancos.
«En Portugal y Reino Unido se ha conseguido»
Además, destaca que en este momento donde los bancos están cerrando oficinas físicas y ofreciendo productos y atención más personalizados, tiene más sentido que el acceso al efectivo en cajeros también lo ofrezca un especialista, como es su caso.
Recuerda que esto ya se ha conseguido en muchos países, entre ellos Portugal o Reino Unido. Así, en el primero, se llegó a un acuerdo hace más de 30 años entre todos los bancos portugueses para crear su propia red Multibanco gestionado por SIBS, para no cobrar tastas al cliente nacional.
“El acceso al efectivo es universal y todos aportan su granito de arena”. Los ingleses hicieron lo propio y crearon un conglomerado que se llama Link, donde todos los bancos y fabricantes de cajeros se adhieren, y pactan cuánto se cobran entre ellos de comisiones por retiradas de efectivo para que al cliente final siempre le salga gratis.
Cashzone en la España rural y aliado de las fintech
La desbancarización de la sociedad, sobre todo en la España rural, preocupa mucho a las administraciones, que han pedido a Cashzone la instalación de cajeros para que determinada población pueda seguir teniendo acceso al efectivo.
Los datos hablan por si mismos, hay 1,3 millones de personas que no tienen acceso a cajeros en su población. Andalucía, Castilla y León o la Comunidad Valenciana se encuentran entre las zonas más afectadas.
Al respecto, indica que recientemente acaban de desembarcar en la isla de Tabarca, a unos 8 km del puerto de Santa Pola, habitada desde hace cientos de años, pero donde no hay una sucursal bancaria, ni mucho menos un cajero. “Ahora el único servicio es el nuestro”.
Asimismo, recuerda la importancia de una empresa global de cajeros para las fintech o bancos nativos digitales, que han nacido sin sucursales pero que necesitan su infraestructura para poder ofrecer efectivo. En España, tienen acuerdos con Bnext, N26, Cetelem o Fintonic.
“Nosotros cobramos 0,65 céntimos por el servicio y ellos no lo repercuten al cliente. Sin embargo, ellos pueden ofrecer efectivo y seguridad sin tener una red”.
La pandemia no acabará con el efectivo
Los datos de 2020 sobre retirada de efectivo estuvieron muy afectados por la pandemia, entre el miedo al contagio (que la OMS tuvo que desmentir) y el aumento de los pagos digitales, muchos vaticinaban el fin del dinero cash.
Sin embargo, en lo que va de 2021, el efectivo ya ha recuperado volúmenes que, no son los de 2019, pero siguen siendo muy fuertes. Jimmy Tarazona tiene claro que la pandemia no acabará con el efectivo y este seguirá conviviendo con las monedas y pagos digitales mucho tiempo.
En cuanto al euro digital, indica que “no viene tanto a competir con la moneda física sino a dar seguridad en los pagos digitales”. En su opinión, el pago en efectivo tiene bastantes aspectos positivos, la universalidad principalmente, que es lo que persigue el Banco Central Europeo frente a las criptomonedas.
Pero hay otros, como la privacidad. “Con los pagos digitales las empresas saben lo que te gusta, lo que compras, las costumbres de consumo de todo el mundo y a las personas les preocupa”. Respecto a Bizum, Whatsaap u otras plataformas que están permitiendo el envío inmediato de dinero, señala que lo más importante es “la libertad en la elección de pago», y que todos han venido a traer nuevas soluciones.
De hecho, cree que Bizum es el ejemplo perfecto de cómo la colaboración entre bancos puede hacer que algo sea un éxito y eso es lo que persiguen con su red de cajeros. El futuro pasa por la especialización de la banca en los servicios financieros y el mundo de los cajeros “no es una excepción”, reivindica.
“Las sinergias y economías de escala son importante porque son maquinas caras y delegarlo a especialistas como nosotros, y concentrarse en el banco y sus productos, traerá ventajas para todos”, concluye.