La justicia británica multa a Celsa por la muerte de dos ingenieros
La siderúrgica de la familia Rubiralta deberá pagar dos millones de euros por deficiencia de seguridad en su planta de Cardiff
Los tribunales del Reino Unido fallan contra Celsa. La siderúrgica de la familia Rubiralta fue condenada la pasada semana a pagar 1,8 millones de libras (2 millones de euros) por el fallecimiento de dos de sus ingenieros en su fábrica de Cardiff en noviembre de 2015. La Cardiff Crown Court consideró culpable a la mayor sociedad industrial de Cataluña por las deficiencias de seguridad existentes en la instalación.
Según explicó el magistrado en la corte, el sistema de apagado automático no funcionó después de que el aceite utilizado para lubricar rodillas superara la temperatura recomendada. Además, los trabajadores no pudieron apagar la herramienta manualmente ya que la alarma también falló. El juez añadió: “La compañía se declaró culpable de no haber realizado las evaluaciones de riesgo adecuadas; de haberse hecho, el accidente no habría sucedido”.
Fuentes de la empresa contactadas por Economía Digital se disculparon por «las circunstancias que contribuyeron al evento más trágico» de su historia. Y añadieron: «Nuestra prioridad no es otra que garantizar plenamente la seguridad de cada colaborador y trabajamos intensamente para evitar que algo así pueda volver a suceder».
Celsa admitió no haber hecho una evaluación adecuada de los riesgos existentes en la fábrica
En el juicio, la compañía que preside Francesc Rubiralta admitió no haber hecho una evaluación adecuada de los riesgos y dejó claro que los dos trabajadores fallecidos no habían sido los culpables de la explosión. Richard Bowen, director de seguridad de la fábrica, señaló que algunos empleados no tenían capacitación en estimación de riesgos y que la siderúrgica no implementó los mecanismos para que sí la tuvieran.
A los dos millones de euros de sanción se le suman 145.000 libras (162.000 euros al cambio actual) en costas judiciales y un recargo de 120 libras (134 euros) por cada una de las víctimas.
Celsa en el Reino Unido
Celsa cuenta con más de 500 empleados en Reino Unido y produce alrededor de 1,2 millones de toneladas de acero cada año.
En diciembre de 2018, la banca refinanció la deuda de la filial británica hasta 2023. Según dijo la empresa en su momento, el alargamiento de los vencimientos no sólo garantizará mejoras operativas, también permitirá encarar nuevos proyectos en el país en los próximos ejercicios.