La exportación catalana, sólo en 100 empresas
La Cambra de Comerç identifica las cinco claves del éxito del exportador
La salida de la crisis económica, en Catalunya y en el conjunto de España, pasa en gran medida por las exportaciones, dada la debilidad del mercado interno. Pero, pese a los esfuerzos de los últimos años y los reiterados mensajes de las administraciones, el sector exportador catalán depende en exceso de sus 100 primeras firmas, que no acaban de ejercer como tractoras en beneficio de otras pequeñas y medianas empresas.
Pese a esta circunstancia, importante para poder superar la situación, en el 2011 más de 2.300 empresas catalanas iniciaron o reiniciaron su actividad exterior y contribuyeron en un 24% al crecimiento de la exportación.
Los datos, con algunas conclusiones, aparecen en la Memoria Económica de Catalunya del 2011, de la Cambra de Comerç, y obedece, en gran medida, a un encargo del conseller de Economía, Andreu Mas-Colell, que el pasado año se interesó por conocer el peso real de las empresas exportadoras.
Y la realidad es que Catalunya, que se caracteriza por ser la economía más abierta del conjunto de las comunidades autónomas -un 28% de las exportaciones españolas son de empresas catalanas- alcanza ese privilegiado lugar gracias a las 100 empresas con mayor dimensión: Gas Natural; Seat; Abertis; Nissan Motor Ibérica; Roca Corporación Empresarial; Mango, Puig, La Seda, Grífols o Nortia.
Estas champion export firms, no llegan al 1% del número total de empresas exportadoras, pero explican hasta el 58% de la recuperación de la exportación en 2010 y 2011, muy por encima de su peso en la exportación total, que es del 47%.
Redes en los países de destino
La Cambra considera que se deberían estudiar fórmulas para aumentar la capacidad de arrastre que pueden ejercer estas empresas líderes en otras empresas medianas y pequeñas. Y una de las posibilidades que se ofrecen es que subcontraten o estimulen la creación de redes de empresas exportadoras en los países de destino.
El estudio de la Cambra identifica hasta cinco claves del éxito de la exportación, tras una encuesta a más de 500 centros industriales. El resultado es que las empresas de más dimensión; más innovadoras (en el proceso y en el producto); con un esfuerzo inversor regular; con una alta cualificación de sus trabajadores y con una presencia de capital extranjero, son las que tienen más garantías para competir en los mercados mundiales.
Romper el pesimismo
Mas-Colell, presente en la presentación de la Memoria de la Cambra, ha puesto nuevos deberes al organismo que preside Miquel Valls. Y reclama un estudio en profundidad sobre las spin-off, las empresas que se crean en el seno de otras y que han proliferado en los últimos años pese a la crisis.
Precisamente, el clima de crisis, la percepción de que todo va mal, acaba provocando una realidad muy negativa. Para romper ese círculo, el catedrático de Economía de la Universitat Pompeu Fabra, Oriol Amat, también presente en el acto de la Cambra, ofrece un dato que sorprende al escucharlo. Más del 60% de las empresas catalanas en el 2011, asegura, han incrementado tanto su facturación como sus beneficios.
Lo que ocurre, sin embargo, es que han ganado competitividad, sí, pero a costa de reestructuraciones de plantilla. Para Amat el obejtivo es ahora el de lograr que se pueda beneficiar el conjunto de la sociedad, con la generación de empleo.