La expansión de Pimec en el Baix Llobregat genera controversia
La asociación AEHBALL critica a la Generalitat, al Ayuntamiento de Sant Feliu y a la patronal de pymes por connivencia política e institucional
La expansión de Pimec en l’Hospitalet y en la comarca barcelonesa del Baix Llobregat levanta alguna que otra ampolla. Por ejemplo, el descontento de AEHBALL, una patronal de esa zona adscrita a Foment del Treball, que el domingo arremetió contra la asociación de pymes y contra el presidente de la Generalitat, Artur Mas, por darle cobertura política e institucional.
En opinión de la Asociación Empresarial de l’Hospitalet y Baix Llobregat (AEHBALL), el apoyo que recibe Pimec es injustificado. La crítica se produce justo el mismo día que Mas inaugura unas nuevas instalaciones de Pimec en Sant Feliu de Lobregat, que son la sede de la delegación del Baix Llobregat y l’Hospitalet.
La controversia se ha suscitado porque las nuevas instalaciones son propiedad del consistorio y han sido cedidas para el uso patronal, una actuación que AEHBALL considera “inaceptable y poco clara”, en palabras de su directora Rosa Fiol.
Pimec ha instalado una nueva sede en el edificio del Centre de Promoció de Sant Feliu. Se trata de una planta de unos 160 metros cuadrados y puede disponer, asimismo de las zonas comunes del inmueble. “Estábamos en otro sitio y se nos quedó pequeño». «Fue el ayuntamiento quien nos ofreció instalarnos aquí para dar contenido al centro y minimizar costes”, asegura Antoni Cañete, secretario general de Pimec.
La patronal que dirige no pagará alquiler pero sí que contribuirá a los gastos comunes del edificio y abonará los servicios que reciba. Justamente la ausencia de un alquiler es lo que enerva a Fiol: “Un ayuntamiento no está para eso, una asociación privada ha de poder pagar sus locales. ¿Cómo representará después a las empresas ante el Ayuntamiento de Sant Feliu?”.
¿Quién es quién en la comarca?
Aunque AEHBALL se arroga la representatividad empresarial del Baix Llobregat y considera a Pimec una organización de Barcelona, lo cierto es que la patronal que preside Josep González es el resultado de la fusión de las antiguas Pimec, AEI y Sefes. Esta última nació en 1976 en la comarca fruto de la necesidad del empresariado de la zona de defender sus intereses ante un incipiente movimiento obrero del postfranquismo.
En el fondo de este enfrentamiento sigue como subyacente las divergencias de modelo que existen entre Pimec y algunas organizaciones empresariales de carácter territorial y vinculadas a Foment/Fepyme. Y, no menos importante, la crítica al Govern de la Generalitat por lo que Fiol considera un apoyo directo y tácito a Pimec. “Que no se ponga de moda esto, que los políticos guarden las formas”, se queja la directora de AEHBALL refiriéndose a Mas y al alcalde de ICV en Sant Feliu a Pimec.
Pimec aboga por la colaboración
Según Fiol, los representantes de la patronal de pymes no son claros. “Son gente que actúa de forma atípica, no están en el territorio”. Una crítica que Cañete justifica por una especie de ataque de celos ante el éxito de la inauguración (han asistido una veintena de alcaldes además del jefe del Ejecutivo catalán) y que minimiza con datos sobre representantividad.
Según el número dos de Pimec, de las 50.000 empresas de la comarca, entre el 60% y el 70% están representadas por su organización. “Nos parece que lo interesante entre asociaciones empresariales es sumar, y estamos dispuestos a ello”, remata Cañete.