La economía catalana se aleja de la recesión
El PIB creció un 0,1% en el segundo trimestre del año
La economía catalana podría haber dejado atrás la recesión. Aunque los datos macroeconómicos no benefician todavía a los ciudadanos, y habrá que esperar hasta septiembre y octubre para comprobar cómo evoluciona el paro –más allá de la estacionalidad– lo cierto es que algunos indicadores comienzan a ser positivos.
El Producto Interior Bruto (PIB) catalán creció un 0,1% interanual el segundo trimestre de este año y después de 18 meses consecutivos de caída, tal y como ha explicado este miércoles el presidente de la Cambra de Comerç, Miquel Valls, según el análisis de situación realizado por la institución junto con el Institut de Estadística de Catalunya (Idescat).
Esa décima de crecimiento implica que se modere la caída interanual del PIB catalán, que se sitúa en el -1,3%.
Mejoran todos los sectores
El buen comportamientos de la exportación ha impulsado la actividad industrial, y ha ayudado a ese leve crecimiento, junto con los servicios turísticos. En cualquier caso, la Cambra de Comerç destaca que todos los sectores han experimentado una mejora.
La Cambra concluye, tras los resultados obtenidos por la Encuesta de Clima Empresarial de Catalunya, que existe una percepción de que la situación económica ha comenzado a cambiar.
Los empresarios dedicados a la exportación, por ejemplo, aseguran que la facturación evoluciona de forma positiva y crece en el segundo trimestre. El 53% de ellos afirma que ha tenido un aumento de ventas, un porcentaje superior al 21% que afirma que ha descendido, o mucho mejor que los resultados del pasado año, cuando el 44% de los empresarios señalaba que, efectivamente, experimentaba un aumento de la facturación.
Menor inversión pública
El elemento negativo, sin embargo, en el que la Cambra insiste de forma constante es que la inversión ejecutada en Catalunya por parte de Fomento ha sido inferior a la comprometida durante 11 años consecutivos.
Catalunya, según los datos de la Cambra, ha recibido el 16,9% de la inversión de Fomento, la que es susceptible de territorializar, en el periodo 2001-2011, por debajo del 18,7% que le debería haber correspondido según su peso económico, y tal y como apuntaba la disposición adicional tercera del Estatut, que, posteriormente, el Tribunal Constitucional entendió que no era válida, en su sentencia del 2010.
La Cambra, pese a todo, sigue considerando que el Gobierno debería rectificar y mantener un mayor volumen de inversión pública en Catalunya.