La dirección de Gallina Blanca se defiende del conflicto laboral en la compañía

La dirección de Gallina Blanca ha detallado la oferta que ha entregado a la plantilla del grupo de alimentación para evitar el conflicto laboral en el histórico centro de trabajo de Sant Joan Despí (BCN). La compañía de la familia Carulla ha señalado en un comunicado que proponía mantener el poder adquisitivo de la plantilla gracias al carácter bianual del convenio colectivo en negociación.

Las condiciones que asegura que están sobre la mesa de negociación pasan por congelar la retribución de 2013, la medida que ha motivado que el comité de empresa convocara paros en la planta este miércoles, a cambio de compensar la mejora salarial en el ejercicio vigente.

Variable

La iniciativa pasa por incrementar el 0,8% en 2014, el doble que el IPC real en abril (llegó al 0,4%). Así, se incluye el 0,3% que corresponde al IPC del año anterior más una décima de margen por si la evolución de los precios crece antes de que finalice el año. La cúpula de Gallina Blanca también está dispuesta a añadir un 0,5% en concepto de variable, una subida que no se consolidará en el próximo convenio.

“Si se tienen en cuenta las condiciones ofertadas por la compañía, el incremento salarial propuesto del 0,8% más el variable de medio punto, supera la suma del IPC de los dos últimos ejercicios, que es del 0,7%”, afirma el grupo en el documento. Asimismo, indican que “cualquier medida de presión que se impulse de forma unilateral sólo va en contra del proceso de diálogo abierto”.

Tribunal Laboral

El comité de empresa de Gallina Blanca tacha de “éxito rotundo” los dos paros que se han convocado en la factoría catalana este miércoles. Esperan que entre finales de esta semana y principios de la siguiente el Tribunal Laboral catalán convoque un nuevo encuentro entre las partes para conseguir el ansiado acuerdo.

Por el momento, las posiciones no se han acercado.