La cúpula de Telefónica compromete 1M de euros de su bolsillo
Los miembros del Comité de Dirección no han dejado de gastarse su dinero durante este año a base de comprar títulos de la compañía
Telefónica cerrará este año con un nuevo plan para su futuro. Las turbulencias que ha atravesado la compañía, en la línea del resto del sector, han golpeado a su cotización y ha obligado a sus principales directivos a mostrar su confianza en el presente y futuro que tiene por delante la compañía presidida por José María Álvarez-Pallete.
De acuerdo a los cálculos formulados en base a las compras por parte de los miembros del comité de dirección a lo largo de este año, seis integrantes de la compañía han comprometido conjuntamente casi un millón de euros de su bolsillo a base de comprar títulos de Telefónica, que al cierre del pasado viernes cotizaban a 6,53 euros y que en lo que va de año ceden cerca de un 12%.
Se trata de la plana mayor de la compañía: dos miembros del consejo de administración y del comité de dirección (Álvarez-Pallete, el presidente, y Ángel Vilà, su número dos) y otros cuatro integrantes de este segundo órgano, configurado de nuevo hace apenas un mes tras la presentación de la nueva estrategia de la compañía.
Forman parte de este grupo Laura Abasolo, directora de finanzas y control (CFCO); Guillermo Ansaldo Lutz, consejero delegado de Telefónica Infra; Pablo Antonio de Carvajal, director de asuntos públicos y regulación del grupo, y Eduardo Navarro, director general de comunicación, marca, asuntos públicos y sostenibilidad.
La cifra de altos directivos de Telefónica representa una tercera parte de los miembros que constituyen todo el equipo directivo, donde figuran otros 12 miembros, entre los que están los consejeros delegados de las principales filiales de Telefónica (Reino Unido, Brasil y Alemania, además de España), estratégicas para el grupo desde finales de noviembre.
Así ha sido la inversión de los directivos
El apoyo a la compañía en bolsa se ha realizado en dos movimientos: uno ha sido mensual, a través de la inscripción en el Plan Global de Acciones para Empleados (GESP) de Telefónica, un plan que se aprobó en la junta general del pasado año y se extiende a todos los empleados del grupo.
Es una inversión modesta, pues como máximo se pueden comprar acciones por un importe de 1.800 euros al año, es decir, 150 euros al mes. Significa que la suscripción al plan obliga a depositar ese dinero todos los meses — las últimas compras se produjeron el pasado jueves 18 de diciembre— desde el momento en el que se adhieren, sean o no directivos.
[Puedes comprobar todas las compras de los directivos y sus importes en esta hoja de cálculo]
El segundo apoyo ha sido excepcional, a través de compras de mayor volumen en momentos en los que la acción había caído tanto que, a ojos de la compañía, no reflejaba el valor real.
Estas compras se dieron sobre todo a partir de la segunda mitad del año, en agosto, cuando la cotización llegó a niveles que no se recordaban desde 1977 y que provocaron posteriormente una reunión del consejo que terminó con decisiones de calado para el futuro de la operadora, como la venta de torres y un ajuste de plantilla.
Telefónica y su año de cambios
Cómo evolucionará la cotización y, por tanto, la inversión de los directivos de Telefónica dependerá enormemente de los resultados que se deriven del plan de la nueva Telefónica.
Ya se han llevado a cabo las primeras decisiones. En Brasil se han traspasado más de 1.900 torres de telefonía a Telxius y en Hispanoamérica la compañía comunicó durante esta semana cómo quedaba su equipo, con el objetivo de «garantizar en la región la mejor propuesta de valor a los clientes de forma sostenible», explicaron.
Telefónica también ha tenido tiempo de anunciar cambios en Alemania. Allí prepara más de 1.300 millones para crecer a cambio de sacrificar el dividendo. La compañía de telecomunicaciones justificó su decisión en la necesidad de invertir durante los próximos dos años para no solo mantener su cuota de mercado, sino aumentarla.