La banca presiona a Iberia y Air Europa: avisa de que tendrá ‘la última palabra’ en el acuerdo

Iberia ha roto con Air Europa, no quiere comprarla por 500 millones de euros pese a que esta cantidad ya era un 50% más baja de lo que habría pagado en 2019. La aerolínea que preside Javier Sánchez-Prieto rechaza ahora quedarse con el 100% de la compañía de la familia Hidalgo y estudiará durante un mes un nuevo acuerdo. 

Lo más probable es que Iberia se quede con el 49% de la empresa y el otro 51% se reparta entre el Gobierno y la dueña de Air Europa (el grupo Globalia), indican fuentes financieras. Pero sea cual sea la decisión, la banca acreedora debe tener la última palabra.  

No solo por el crédito ICO de 141 millones que concedieron en mayo de 2020, que además está avalado al 70%, sino porque la empresa tiene un alto nivel de deuda y cualquier movimiento afecta a los acreedores, añaden estas fuentes.  

“Cualquier paso que de la aerolínea debe ir de la mano de la banca acreedora ya sea porque necesitará más refinanciación, una extensión de la deuda o entrada de dinero nuevo”, comentan. Y aquí, el Banco Santander, BBVA, Caixabank y Sabadell son los que más se juegan. 

La empresa que auditó sus últimas cuentas, las de 2020, indicaba la existencia de una “incertidumbre material” sobre la capacidad de Air Europa para continuar como empresa en funcionamiento debido a su alto grado de exposición al sector turístico, el más perjudicado por la pandemia. La aerolínea perdió el pasado ejercicio 427,7 millones de euros. 

Precisamente por esto, en el contrato con Iberia existe una cláusula para que la operación sea apoyada por los acreedores y el Gobierno, recuerdan. Y es que la compañía también recibió el año pasado un rescate de 475 millones de euros procedentes del fondo de solvencia de la SEPI.   

Con todo, la deuda de la aerolínea ha pasado de 750 millones en 2019 a más de 1.000 millones, solo a proveedores debe 210 millones de euros, según reflejan sus cuentas. Los expertos creen que las pérdidas que reporte Air Europa este ejercicio serán muy similares o incluso superiores a las del año pasado. 

Por esta razón, las entidades financieras pidieron a Iberia que si cancelaba la compra de Air Europa, pagara la tarifa de ruptura y que esta cantidad no fuera a amartizar deuda, sino que la empresa lo mantuviera en caja para hacer frente a los gastos a corto plazo. 

“La empresa atraviesa una situación delicada, está en quiebra técnica y no se le puede dejar caer” comentan estas fuentes. Air Europa presenta un fondo de maniobra negativo por importe de 188 millones de euros, y las pérdidas de 2020 han reducido su patrimonio neto a –364,2 millones. El número de pasajeros cayó hasta los 4,2 millones en 2020 frente a los 13,1 de 2019.   

Iberia ya había pactado por contrato pagar 40 millones de euros si cancelaba la compra, pero además ha ofrecido otros 35 millones de euros. Estos 75 millones se aplicarán para reducir cualquier precio de compra futuro si se llega a un nuevo acuerdo y para evitar cualquier litigio.  

Según informó la aerolínea este jueves, ha cerrado un acuerdo de intenciones con Air Europa para evaluar, antes de finales de enero de 2022, otras estructuras que puedan resultar interesantes para ambas, ofreciendo beneficios similares para sus accionistas, clientes y empleados. 

Air Europa ha sido una de las mayores víctimas de la pandemia, perdió un 70% de pasajeros el año pasado y este 2021 no ha conseguido recuperarse del batacazo del coronavirus pese a que la empresa ha recurrido a todas las ayudas puestas en marcha por el Gobierno, los ERTE, los ICO y el rescate de la SEPI.