Joan Oliver y Xavier Martorell irán a juicio por los espionajes de Método 3
La jueza ve indicios de delito por parte de los dos ejecutivos del Barça en tiempos de Laporta
Joan Oliver y Xavier Martorell irán a juicio. Los dos ejecutivos del Barça en tiempos de Joan Laporta están acusados de la comisión de dos delitos de administración desleal del artículo 295 del Código Penal (Oliver y Martorell) y de un delito de estafa agravada de carácter continuado recogido en el artículo 250.1.6 CP (solamente Martorell). El motivo, los espionajes que encargaron a la agencia Método 3, que supuso un desembolso para el club de 408.661,34 euros.
El caso Método 3 queda, por tanto, visto para juicio. Así lo ha decretado la jueza María Antonia Coscollola Feixa, quien considera que hay indicios de delito suficientes como para no archivar el caso. La titular del juzgado de instrucción número 24 de Barcelona ha solicitado a través de un auto de apertura de procedimiento abreviado dictado el 17 de febrero que tanto el Ministerio Fiscal como las acusaciones –FC Barcelona y Oriol Giralt– presenten los pertinentes escritos de acusación en el plazo de 10 días hábiles.
Esta situación se produce ahora, en un contexto muy distinto al que se perfilaba hace varios meses. En marzo de 2015 el Barça despidió al abogado que llevaba el caso, Josep Riba, y contrató los servicios del bufete González Franco Abogados, quien también conduce su defensa en el caso Neymar. La abogada María Pascual se hizo cargo del caso y, en apenas un mes, consiguió que un caso que había sido archivado fuese reabierto para que, finalmente, vaya a juicio.
El ‘pendrive’ misterioso y un testigo clave
La abogada encontró nuevas pruebas que comprometían tanto a Joan Oliver como, y especialmente, a Xavier Martorell. La aparición del socio del Barça Oriol Giralt, también abogado, personándose en la causa como acusación y aportando nuevas pruebas a través de un misterioso pendrive que le dejaron en la puerta de su casa fue otro punto clave. Aunque el aspecto más decisivo fue la declaración del detective de Método 3 Julián Peribáñez, que aportó todos los encargos de espionaje que Martorell le había encomendado y las facturas.
El quit de la cuestión es que se llevaron a cabo numerosos espionajes que, según entiende la jueza, no tenían un interés directo con la actividad que desarrolla una entidad deportiva como es el FC Barcelona. Es por este motivo que se habla de la comisión de un delito de administración desleal. En el caso de Martorell, además, existe un posible delito de estafa por haber encargado informes sobre varios ex concejales del ayuntamiento de Sant Cugat del Vallès.