Italia ultima el informe para dejar al dueño de Abertis sin autopistas
La ministra de Infraestructuras italiana asegura que hay “demasiadas evidencias” sobre el deficiente mantenimiento de las autopistas de Atlantia
El horizonte de Atlantia, mayor grupo concesionario del mundo que incluye a la española Abertis, es cada día más negro. Casi año y medio después del accidente de Ponte Morandi, en Génova, el gobierno italiano ultima el informe sobre el suceso y lo que está transcendiendo apunta a que el gigante puede perder todas las concesiones viarias en el país, lo que liquidaría más de la mitad de su volumen de negocio.
El cambio de ejecutivo en Italia pareció beneficiar al gigante controlado por la familia Benetton, pues la nueva ministra de Infraestructuras, Paola De Micheli, era más cercana al mundo empresarial que su predecesor, del Movimiento Cinco Estrellas. Pero las evidencias de falta de mantenimiento son demasiadas como para no tomar medidas, según explicó este jueves la ministra, que abrió la puerta a despojar de las concesiones a Autostrade per l’Italia (Aspi), la filial de Atlantia en el país.
Existen «demasiadas evidencias de falta de mantenimiento de las autopistas”, adelantó De Micheli en una entrevista radiofónica, que no quiso adelantar mucho más del informe sobre el accidente en el que murieron 40 personas y que será público en unos 15 días. Primero lo presentará al gobierno y al primer ministro italiano, Giuseppe Conte.
La ministra de Infraestructuras italiana ve «demasiadas evidencias de falta de mantenimiento de las autopistas” de Atlantia
“Antes de hacerlo público, lo correcto es mostrárselo al primer ministro y a mis colegas ministros. Pero es evidente que algo ha sucedido en estos años, o más bien me temo que algo no ha sucedido: tenemos demasiadas evidencias, por desgracia, de situaciones de falta de mantenimiento o retrasos”, explicó De Micheli.
La ministra no quiso aventurar las consecuencias que tendrá el informe para Aspi y la gestión de las autopistas en el país, pues éstas deberá revisarlas el gobierno de forma conjunta. Pero sí que fue clara al decir que es necesario que las concesiones sean revisadas las veces que sea necesario por el bien común.
«Siempre he dicho que toda relación de concesión entre el estado y las concesionarias debe revisarse, porque en demasiadas ocasiones se dan muchas ventajas a la empresa y se pone al Estado en una condición de debilidad”. Sobre Aspi, admitió su importancia: «Estamos hablando de una historia muy complicada, de una concesión que cubre 2.800 kilómetros de autopistas».
Presiones en el gobierno Italiano para liquidar a Atlantia
Mientras la ministra de Infraestructuras ultima los detalles del informe, el Movimiento Cinco Estrellas (M5E), socio clave de Conte, presiona al resto de gabinete para despojar a Autostrade de las concesiones de autopistas en el país. El ministro de Asuntos Exteriores, Luigi di Maio, de M5E, ya ha hablado directamente de dejar a Atlantia sin autopistas en Italia.
Di Maio aseguró que el gobierno italiano trabaja en un decreto para despojar a Aspi de las concesiones, a la vez que restó importancia a las consecuencias negativas de ello: «La retórica de que se pierden empleos» si se revocan las concesiones a Autostrade «no tiene sentido”. “Los Benetton perderán beneficios y así debe ser, pues no hicieron lo necesario para mantener ese puente”.
Autostrade per l’Italia supone más de la mitad de los beneficios de Atlantia, que también cuenta con la gestión de aeropuertos como el de Roma-Fiumicino. Por suerte para el grupo de la familia Benetton, cuenta con el 50% más una acción de Abertis, que tiene un peso sobre sus beneficios de aproximadamente un tercio.