Isidro Rubiales, la mano derecha de Azuaga llamada a enterrar la guerra interna de Unicaja
Unicaja Banco ha cumplido con lo pactado con Liberbank sobre la bocina, dando paso a Rubiales, directivo que lleva en el banco más de 10 años
Unicaja Banco inicia un nuevo ciclo. El anuncio de la incorporación de Isidro Rubiales como nuevo CEO de la compañía es el punto disruptivo de lo que para gran parte de la plantilla del banco malagueño, es la noticia del año. La entrada de Rubiales, pero, sobre todo, la salida de Manuel Menéndez de la dirección de la firma se antoja como el inicio de una nueva era en Unicaja.
Y no es para menos, ya que, desde principios de 2022, la compañía malagueña se encontraba inmersa en una guerra interna en la que Menéndez capitaneaba un bando, mientras que Manuel Azuaga, presidente ejecutivo de la empresa, era el líder del bloque andaluz, el cual, atendiendo a la nueva configuración del Consejo de Administración, es el claro vencedor de una disputa corporativa que se ha llevado por delante a miembros icónicos de la entidad, como Braulio Medel, entre otros.
Isidro Rubiales asume el reto en Unicaja Banco
Sea como fuere, Isidro Rubiales es el llamado a liderar la transición en Unicaja Banco. Tras cerca de dos meses desde que el mercado conoció el cese de Menéndez, el banco malagueño ha optado por incorporar a un directivo de la casa, un movimiento clamado por gran parte de la plantilla. Para los trabajadores del banco, era fundamental que el nuevo CEO, el cual pasará a tener las funciones ejecutivas del presidente, conociese la empresa.
Tal y como informó ECONOMÍA DIGITAL a mediados de junio, la plantilla de la compañía está alineada en que el nuevo consejero delegado debe «conocer tanto lo bueno, como lo malo» de Unicaja Banco, como explican fuentes sindicales a este diario. Al mismo tiempo, la plantilla demandaba un directivo que estuviera impregnado de la idiosincrasia de la entidad y que conociera los hábitos y la forma de trabajar de Unicaja Banco.
Pese a que en la terna de candidatos a suplir a Menéndez había hasta 20 empresarios y banqueros de alto prestigio, como ha podido conocer este diario, el filtro se depuró al máximo y dejó en la carrera a Isidro Rubiales, a José Sevilla, exBankia, y a Enrique Tellado, creador de EVO Banco, según adelantó el diario ElConfidencial.
El nuevo CEO lleva más de una década en el banco
Ha sido el directivo ‘de la casa’ el que finalmente ha sido elegido para suplir a Menéndez y asumir el que, tal y como apuntan desde CESICA, es un «desafío», sobre todo por el momento en el que está la entidad en cuestiones de gobernanza. Isidro Rubiales forma parte de la compañía desde 2011 y, hasta antes de asumir el cargo de consejero delegado de Unicaja Banco, llevaba el área de contabilidad y control y, hasta ahora, era el director adjunto a Azuaga. Con una trayectoria que supera la década, Rubiales es el candidato idóneo según lo demandado por los trabajadores y, sobre todo, a tenor de la experiencia y la huella que ha dejado Menéndez.
Unicaja Banco ha optado por incorporar a un CEO que haya estado inmerso en algunos de los procesos más importantes del banco, como, por ejemplo, la integración de Liberbank o el debut en el Ibex 35. Por supuesto, el nuevo consejero delegado conoce el «modelo de Unicaja», un comentario clave, puesto que la salida de Menéndez también supone eliminar esa ‘Liberbankarización’ impuesta en la plantilla que no convencía.
Unicaja ha apurado el tiempo de Menéndez
Unicaja Banco ha apurado al máximo la etapa de Menéndez. Pese a que el banquero procedente de Liberbank fue cesado por unanimidad del Consejo el pasado 1 de junio, el directivo asturiano ha ocupado este asiento hasta hace 24 horas. La permanencia de Menéndez en la dirección del banco y, sobre todo, que él seguía siendo la voz cantante en el área de organización y negocio de la entidad, estaba incrementando el malestar y el hartazgo en la plantilla. Tal y como explicó ECONOMÍA DIGITAL, y según lo descrito por fuentes internas de la compañía, “todo lo que Menéndez manejaba, no funcionaba”.
El tramo final del directivo en Unicaja Banco tampoco ha valido para abrillantar una etapa cargada de problemas internos, disputas corporativas y división entre directivos. Escollos que, finalmente, han recaído sobre la plantilla de la entidad andaluza.
Unicaja ha hecho los deberes sobre la bocina. La firma tenía hasta finales de julio para solventar sus cuestiones de gobernanza, tal y como especificaba el pacto de fusión entre Unicaja Banco y Liberbank. Todo saltó por los aires con el cese de Menéndez, ya que, a partir de ese momento, la compañía presidida por Manuel Azuaga debía cubrir todas las vacantes existentes en el Consejo, además de encontrar a un nuevo CEO.
Unicaja ha solucionado los vacíos gubernamentales en cuestión de tres semanas y, si las autoridades competentes le dan el visto bueno, el banco abrirá un nuevo ciclo con Rubiales al timón.