Iglesias se rinde al criterio de Calviño y De Guindos sobre Bankia

La vicepresidencia del gobierno está cambiando el discurso de Pablo Iglesias, que ya no ve en Bankia una herramienta sobre la que configurar la banca pública en España.

En una entrevista en La Sexta, que recoge EFE, el líder de Unidas-Podemos se habría olvidado de la entidad que preside José Ignacio Goirigolzarri al hablar del modelo a impulsar. En este sentido, sin renunciar a ella, ve al ICO como una entidad apropiada. «Sánchez y yo estamos de acuerdo en que tiene que haber una banca pública y pensamos que quizá el ICO debe ser la banca pública que necesita España», ha respondido Iglesias a la pregunta de si Bankia deber ser banca pública o privatizarse.

Con este movimiento, Iglesias se plegaría al discurso que ha ido manteniendo Nadia Calviño desde que se cerrara el acuerdo de coalición y el mercado comenzara a temer el impacto que podría tener la entrada en el gobierno de la formación morada. Bankia siempre ha defendido que esperaba que la gestión continuara como hasta el momento y que se preservara la independencia, como había sucedido hasta el momento.

En este sentido, el propio presidente de Bankia, durante la presentación de resultados, insistió en que todos los gobiernos siempre habían respetado la gestión independiente de la entidad y negado tiranteces con Unidas-Podemos, que en algunas ocasiones ha llegado incluso a pedir su dimisión. Goirigolzarri reconoció que todavía no se había visto con los miembros de Podemos del gobierno, pero, al ser preguntado sobre si se venía o no en el banco en un año, no dudó en responder que sí.

Las declaraciones de Iglesias se producen después de que Luis De Guindos, vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE) haya defendido en una entrevista que el proceso de privatización del banco debe continuar y que no se debe parar.

Hasta el momento, el PSOE de Pedro Sánchez y varios de sus ministros -entre ellos Nadia Calviño o Luis de Guindos- habían mantenido que el objetivo era vender el banco; aunque con la coincidencia -también de Bankia- de que el momento de mercado puede no ser el más adecuado. La privatización ya se ha retrasado hasta 2021 y el Gobierno puede volver a mover la fecha.