Iberdrola y Repsol, las empresas que más sufren la guerra comercial eléctrica

Las energéticas tienen muchos frentes abiertos, y el comercial está muy disputado en estos momentos

Repsol

Sede de Repsol en Madrid. EFE/Zipi

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Las grandes empresas energéticas tienen diversos frentes abiertos, y algunos muy dispares. Y todo ello lo deben gestionar de forma paralela. Por un lado, tienen una batalla contra el Gobierno por el nuevo impuesto que entrará en vigor en 2023 con cargo a las cuentas de este ejercicio; y junto a eso, deben gestionar la actividad comercial. Una situación que a Iberdrola y Repsol les ha pasado factura en la primera mitad del año

Así, a la espera de que Naturgy presente al mercado sus resultados del semestre, ya se conocen las primeras magnitudes de algunas grandes empresas. Por lo que respecta a la captación de clientes, Iberdrola ha tenido un comportamiento muy discreto en el segundo trimestre del año. Tras la reagrupación de mercados que comunicaron en los primeros tres meses del año, la compañía de Ignacio Sánchez Galán fijó su cartera de clientes en los 10,72 millones de clientes. 

Tres meses después, la cifra que ha ofrecido Iberdrola al mercado se ha quedado en los 10,71 millones de clientes. Eso supone un leve retroceso, aunque seguramente haya habido un trasvase de usuarios desde las tarifas reguladas (PVPC) a las libres, algo que genera un mejor rendimiento a las empresas debido a los contratos a largo plazo. 

El problema para Iberdrola, según refleja en su informe financiero, es que este trimestre ha hecho una fuerte provisión para mejorar en la captación del negocio comercial. Sin embargo, a la luz de los datos parece que no ha dado un gran resultado. Al menos por ahora. Y es que la guerra comercial en el sector eléctrico empieza a parecerse al mercado de las telecomunicaciones, donde llevan años con agresivas ofertas y robos de clientes. 

Otro problema paralelo 

La otra víctima de este semestre es Repsol. En este caso no se trata de volumen de clientes, puesto que la petrolera ya tiene una cartera de usuarios que supera los 1,5 millones, y no ha parado de crecer en ningún trimestre desde que llegase a este segmento comercial. 

Sin embargo, el problema para la compañía que dirige Josu Jon Imaz es que no consigue hacer rentable a los clientes eléctricos. El primer trimestre del 2022 ya tuvo una pérdida de dinero en esta área, y de nuevo han vuelto a reportar números rojos en este ámbito. El problema, como ya sucedió antes, se debe al coste en la compra de electricidad en un escenario de precios mayoristas muy altos. 

La triunfadora, por ahora 

A la espera de que la compañía presidida por Francisco Reynés presente resultados en la primera semana de agosto, quien de momento tiene motivos para alegrarse es Endesa. La compañía dirigida por José Bogas ha tenido un crecimiento del 18% en su base de clientes del mercado libre, hasta alcanzar los 6,6 millones de usuarios

Es cierto que ha tenido un retroceso en el mercado regulado (16%), el cómputo general le arroja un saldo positivo, algo fundamental después de varios trimestres donde encadenó pérdidas de clientes. 

Raúl Masa

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