Iberdrola presenta otra demanda contra ACS por competencia desleal
La compañía energética acusa a la constructora de Florentino Pérez de haber filtrado una noticia a la prensa para tratar de dañar su imagen en el mercado internacional
Iberdrola ha avivado su batalla judicial particular contra ACS. La compañía eléctrica ha formalizado una nueva demanda contra la constructora presidida por Florentino Pérez, a la que acusa de haber incurrido en un delito de competencia desleal por haber filtrado supuestamente una noticia a la prensa que le perjudica.
La empresa de José Ignacio Sánchez Galán ha presentado en los juzgados de Madrid el texto en el que denuncia que ACS recurrió a los medios de comunicación para poner en marcha una «maniobra torticera y malintencionada» que tenía como objetivo dañar la imagen de la firma y generar dudas entre los inversores a las puertas de la presentación de sus resultados anuales, según ha publicado Expansión.
La denuncia hace referencia a la noticia que publicó el 22 de febrero El Confidencial para informar de que Florentino Pérez preparaba una demanda de 2.600 millones de euros contra Iberdrola por recurrir presuntamente a los servicios del excomisario José Manuel Villarejo para impedir que tuviese representación en el consejo de administración de la energética.
Iberdrola considera que la divulgación de esta información supone una amenaza para su «credibilidad» en los mercados financieros, donde precisamente compite con ACS en la búsqueda de financiación para nuevos proyectos. De ahí, que vean detrás del gesto una competencia desleal por parte de la constructora.
La compañía de Sánchez Galán ha atribuido esta maniobra a un acto de «mala fe» con el que buscan intensificar su batalla particular. «Genera una incertidumbre y pérdida de confianza entre sus clientes y accionistas particulares, en los que en muchos de ellos confluyen ambas condiciones», reza el texto.
Florentino Vs. Sánchez Galán: una batalla judicial de 15 años
ACS ha descartado que estuviese detrás de la filtración de la información que sirvió para sustentar la noticia y ha cargado contra Iberdrola por intentar utilizar sus acusaciones para distraer la atención de la investigación del caso Villarejo. El juez encargado de la instrucción ya ha imputado a Sánchez Galán y a otros tres directivos por los supuestos encargos de espionaje.
El origen de la batalla entre Sánchez Galán y Florentino Pérez se remonta hasta el año 2006. Entonces, el presidente de la constructora intentó entrar en el consejo de administración de la eléctrica tras alcanzar el 20% de su capital, pero recibió el rechazo de la junta de accionistas.
La disputa acabo ya en los juzgados hasta que el Tribunal Supremo decretó en 2014 que la decisión se había tomado de manera justa. Ahora se ha abierto una nueva vía judicial entre las dos compañías.