Iberdrola activa su plan de contingencia para blindarse ante una posible recesión
La principal eléctrica española descarta por completo que el escenario macroeconómico provoque perturbaciones graves en sus planes
El presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán. EFE/Jesús Monroy
La principal energética española, y una de las más importantes del mundo, tendrá precisamente en esa característica una palanca de propulsión para afrontar la potencial recesión que se avecina en los próximos trimestres. Iberdrola ejecuta una enorme apuesta renovable en un marco geográfico diversificado.
Y es que las luces de alarma ya han saltado. A la espera de poner nombre y apellidos a la ralentización económica en la que ha entrado Europa, y que arrastrará a España, las grandes empresas cimentan sus estrategias para los próximos meses. Ante este escenario, según ha podido saber ECONOMÍA DIGITAL, la compañía presidida por Ignacio Sánchez Galán tiene activas sus líneas de actuación que le servirán para amortiguar con relativa comodidad los vaivenes financieros.
Iberdrola lleva invertidos en renovables más de 120.000 millones de euros en las últimas dos décadas. Pero la compañía no se para en esa cifra, y sus últimos movimientos incrementarán los datos de inversión.
Por lo que respecta a la proyección internacional, Iberdrola tiene más de dos tercios de sus beneficios fuera de España, con fuertes crecimientos en Estados Unidos, donde el beneficio de su filial en el país, Avangrid, subió un 46% en el primer semestre, y en Brasil (Neoenergia), con un avance del 14%. También contribuyeron a la subida global de los beneficios sus negocios en Reino Unido (ScottishPower) y en México.
En cuanto a los parámetros financieros de Iberdrola, la compañía cuenta con un balance en el que la mayor parte de su deuda, alrededor del 75%, se encuentra a tipo fijo y con un vencimiento medio de seis años –una fortaleza del sector-. Su colchón de liquidez, de 25.000 millones, le permitiría resistir 27 meses sin necesidad de financiarse.
Y en lo que se refiere a la parte energética, esencial en estos momentos de fuerte inestabilidad, la compañía de Sánchez Galán tiene garantizados todos los suministros para 2022 y 2023 con precios cerrados o con coberturas.
Iberdrola ata en corto la crisis
La energética de origen vasco descartaba por completo que el escenario macroeconómico provoque perturbaciones graves en sus planes, según explicaba en su informe financiero remitido a la CNMV hace unas semanas. Pese a ello, existen predicciones de una intensa crisis a la vuelta de verano, aunque algunas compañías -como es el caso de Iberdrola- cuentan con escudos que las blindan de problemas ante las turbulencias.
De este modo, la eléctrica que preside Ignacio Galán considera, según la información remitida al supervisor de los mercados españoles, advierte de que las consecuencias del escenario macroeconómico son de un alcance temporal limitado y asegura que «no se espera que tengan una consecuencia negativa significativa en los planes de negocio«.
No obstante, tal y como ha publicado ECONOMÍA DIGITAL, muchas empresas del Ibex 35 ya trabajan descontando el escenario desfavorable de los próximos trimestres. Así, algunas compañías han puesto todos los medios para evitar que el complicado entorno tenga efectos secundarios importantes en sus cuentas globales. Es el caso de Iberdrola.
La empresa ha reiterado sus objetivos de beneficio para este ejercicio pese al talón de Aquiles español y explica al supervisor de los mercados que descarta problemas severos pese a la desasosegante situación que tanto economistas como gobiernos y organismos multilaterales prevén.
Un ejemplo de los deberes
Un ejemplo pragmático de estos planes se ha conocido esta semana. Y es que la planta fotovoltaica más grande de Europa, ubicada en la provincia de Cáceres y perteneciente a Iberdrola, ha entrado este miércoles en funcionamiento con una potencia instalada de 590 megavatios gracias a 1,5 millones de módulos fotovoltaicos.
La instalación ‘Francisco Pizarro’, impulsada por la energética, producirá energía limpia suficiente para abastecer a más de 334.000 hogares, o lo que es lo mismo, abastecer a una población similar al conjunto de las localidades de Badajoz, Cáceres, Plasencia y Don Benito.
