Iberdrola gana terreno en la guerra comercial: suma casi 1 millón de clientes en un año

España lleva casi un año de caos eléctrico. Desde la gran nevada a inicios de 2021; pasando por el cambio tarifario en verano; el posterior aumento en los precios del gas, que empujó al mercado mayorista a récord históricos; hasta la invasión de Ucrania por parte del ejército ruso, que ha roto el tablero geoenergético, todo ha dejado un reguero de problemas para las compañías eléctricas. Aunque en este escenario, Iberdrola parece haber sacado la cabeza de manera notable.

Bien es cierto que a nivel económico la situación ha estado complicada, puesto que Iberdrola ha mostrado un importante deterioro en el mercado español en el primer trimestre de 2022. Así lo ha reflejado en la presentación de resultados de los tres primeros meses del año. Sin embargo, el comportamiento comercial ha sido distinto.

Según las cifras aportadas por la compañía dirigida por Ignacio Sánchez Galán, a 31 de marzo de 2022 la energética sumaba un total de 10,7 millones de clientes de electricidad, mientras que en el mismo periodo de 2021 la cifraba se quedaba en 9,9 millones. De esta manera, se trata de una evolución muy importante para la compañía. No obstante, la cifra presenta un asterisco: a los contratos de España se han sumado los de ‘Resto del mundo’, que son las regiones donde la compañía tiene presencia.

Pese a todo, según se puede extraer de las cuentas, en el último trimestre este incremento habría sido superior a los 100.000 usuarios. Esta cifra, en sí misma, representa un cambio de tendencia. Desde hace años las grandes eléctricas, representadas en Iberdrola, Endesa y Naturgy, tenían un balance neto negativo.

De hecho, los máximos responsables de estas empresas asumían que era la tendencia lógica del mercado, pues se trataba de las compañías con mayor número de clientes y que, por lo tanto, lo lógico era ceder terreno entre aquellas pequeñas comercializadoras que habían llegado al sector y que traían, en muchos casos, promociones muy agresivas.

Una vez pasado este primer impacto, y sobre todo teniendo en cuenta cómo ha sido la evolución del último año, donde la tensión de precios ha permitido tener más pulmón financiero a las grandes empresas, de nuevo vuelven a ser las grandes energéticas la que muestran una mejor salud.

Iberdrola saca músculo

En cuanto a los resultados financieros de los tres primeros meses, Brasil y Estados Unidos han sido el motor; mientras que España se ha visto fuertemente afectada por al caos energético que se ha vivido durante los últimos meses. Así, la compañía obtuvo un beneficio neto de 1.058 millones de euros en el primer trimestre del año, un 3% más que en el mismo periodo del ejercicio anterior.

Este gran impulso ha tenido un denominar claro: los mercados internacionales, especialmente Estados Unidos y Brasil, informó la compañía. En el lado opuesto se sitúa España, donde su beneficio registró una caída del 29%, hasta los 337 millones de euros, menos de un tercio del total del grupo, afectado por los altos precios de la energía que no ha traspasado a sus clientes a precio fijo acordados previamente.

En este sentido, señaló que el 80% de la energía vendida a sus clientes de mercado libre está a precios que se sitúan entre la mitad y un tercio inferior a los precios de la tarifa regulada.

Este contexto se ha visto marcado por un alza de los precios mayoristas inusual desde que el ejército ruso invadió Ucrania. Desde entonces el Gobierno español ha trabajado contrarreloj por intentar paliar la situación. Pero no ha sido lo suficiente para que Iberdrola haya sufrido el impacto en sus cuentas en el mercado nacional.