Alerta para Iberdrola y Endesa: Ribera prepara un recorte de beneficios tras el OK de Bruselas
Desde hace días se esperaba la autorización de Bruselas para adoptar las medidas oportunas que impacten en el recibo de la luz
La Unión Europea ya ha dado las herramientas necesarias a los distintos Estados miembro para que puedan maniobrar de cara a rebajar la factura de la luz. En este sentido, la ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, ya trabaja en el paquete de medidas que se adoptarán en España para frenar la escalada de precios que se ha vuelto a disparar desde la invasión de Ucrania por parte del ejército ruso. Entre esas medidas, el Ejecutivo retomará la posibilidad de recortar los ‘windfall profits’ a las grandes eléctricas, una situación que afecta sobre todo a Iberdrola y Endesa.
Desde hace días se esperaba la autorización de Bruselas para adoptar las medidas oportunas que impacten en el recibo de la luz que lleva días disparado en el mercado mayorista y que afecta a los consumidores del PVPC (tarifa regulada) que está indexado al sistema marginalista de tarifas.
De esta forma, la Unión Europea otorga la capacidad de redistribuir los ingresos de los altos beneficios del sector energético y el comercio de emisiones hacia los consumidores, una de las reclamaciones que el Ejecutivo española llevaba tiempo reclamando. Así, la normativa europea sobre subvenciones también abre la puerta a los Estados miembros a ofrecer apoyo a las empresas afectadas por los altos precios de la energía y reducir su exposición a su volatilidad a medio y largo plazo.
Aunque el gran movimiento que prevé Transición Ecológica tiene que ver con el recorte a la sobrerretribución que tienen las tecnologías inframarginales como la nuclear y la hidráulica. Así, Bruselas permite que se puedan adoptar medidas fiscales para gravar temporalmente los ‘beneficios caídos del cielo’ de las eléctricas, una medida que, según la Agencia Internacional de la Energía, permitiría recaudar 200.000 millones de euros en 2022.
Esta medida pone el foco principalmente en los grandes generadores de energía: Iberdrola y Endesa. Una situación que ya se ha vivido, pero que en esta ocasión cuenta con el beneplácito de Bruselas. Una situación que Teresa Ribera no dejará pasar para ajustar cuentas con las empresas que ya se opusieron el año pasado a que sucediera esto; es decir, que las tecnologías que no emiten CO2 no cobren el ajuste de precios en el mix energético.
El siguiente paso del equipo del Ribera será agilizar los trámites para ejecutar esta acción que no será la única que se prepare desde el Ministerio. Aunque también está por ver cómo será la reacción de las empresas cuando se traslades las propuestas pertinentes.
Otras medidas que llegarán
El Ejecutivo comunitario también presenta a los Estados miembros orientaciones adicionales para limitar el contagio de los altos precios del gas a los precios de la electricidad en circunstancias excepcionales, como por ejemplo limitando los precios temporalmente, algo que permite en casos de emergencia el marco normativo del mercado eléctrico.
La Comisión también estudiará mecanismos para optimizar el diseño del mercado de la electricidad para aprovechar los beneficios de las energías de bajo coste así como un marco de ayudas para empresas afectadas por las crisis que se enfrentan a altos costes energéticos.
A vueltas con el gas
El otro punto delicado que también ha tenido que torear la ministra tiene que ver con las interconexiones gasistas con el resto de Europa. Una situación en la que se ha referido en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, y en la que Teresa Ribera ha vuelto a dejar muy clara su postura con respecto a las tecnologías que no entran dentro de su agenda.
Así, Ribera ha dicho que el gasoducto Midcat que une España y Francia debe estar financiado como proyecto europeo, ya que serviría para garantizar el suministro de países vecinos y transportar en el futuro gas natural mezclado con gases renovables y, posteriormente, hidrógeno verde.
Asimismo, la ministra ha recordado que España cuenta con un tercio de la capacidad de regasificación de Europa y los consumidores de gas españoles pagan por esa seguridad de suministro a través de lo que abonan en sus facturas de gas para financiar esas instalaciones. Ribera ha añadido que es verdad que tiene sentido que esa capacidad tan grande de regasificación de España pueda ser también beneficiosa para la seguridad del suministro de los vecinos europeos, por lo que el coste de la interconexión de gas tendría que tener un «reflejo adecuado a nivel europeo».