Los hoteles doblan los ingresos por venta directa tras disparar las reservas en Semana Santa

Semana Santa será la prueba de fuego del turismo español para ver si, al fin, deja atrás la pandemia. Justo hace un año, los últimos resquicios de la variante ómicron aún lastraban su negocio, pero sin rastro del covid, todo apunta a que será una temporada récord. En este contexto, el aumento de la ocupación durante la próxima semana y el boom de las reservas directas ya han doblado los ingresos procedentes de este canal en comparación con las cifras de 2019.

Esta es una de las conclusiones extraídas del informe Smart Observatory elaborado por la consultora PwC y la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (CEHAT). Según los datos analizados, las ventas procedentes del canal directo, en auge desde la pandemia frente a canales como las agencias de viajes, se han incrementado en un 126% respecto al año previo al covid, gracias a la subida de precios: el ADR, el precio medio por habitación ocupada, ha crecido un 19%.

Por geografías, los hoteles canarios registran, con diferencia, la mejor proyección de los ingresos, creciendo en un 249% en comparación con la facturación registrada los días previos a la Semana Santa de 2019 gracias al fuerte crecimiento de la demanda. Le siguen Andalucía (+145%) y Madrid (+141%).

Respecto al 2022, los ingresos por venta directa también han crecido. En este caso, la subida de las tarifas también ha jugado un papel importante, con el ADR aumentando en un 13%, aunque gran parte del incremento ya proviene de una recuperación de las reservas, que se ha disparado en un 22% en todos los meses de primavera.

Crece la ocupación

“La mayor proximidad de la Semana Santa en 2023, el cambio de comportamiento en el turista (que ha aumentado la antelación en la reserva) y el crecimiento del canal directo sobre otros canales incrementan sobremanera las reservas en cartera”, expone el informe. PwC y CEHAT aseguran que estas cifras son un reflejo de la buena evolución de los alojamientos turistas, algo también plasmado en la reducción considerable de las cancelaciones, que se han desplomado respecto el 2022.

Todos estos factores permiten al sector augurar una Semana Santa de éxito. Jorge Marichal, presidente de la patronal hotelera, aseguró esta semana que la ocupación para las vacaciones de primavera llegará al 80%, 12 puntos más que en 2019, destacando las reservas de sol y playa. Segmentos como los campings alcanzarán el 90% y el interior se quedará en un 65%.

Por su parte, José Manuel Fernández Terán, socio responsable de Turismo en PwC España, aseguró que “la temporada de primavera 2023 arranca con unas previsiones que mantienen la senda de crecimiento observada en los últimos trimestres, gracias a una cartera que supera los registros de 2019, que fueron de récord, y a una intención de viaje que se sigue manteniendo fuerte, pese a la inflación y la subida de tipos de interés”. Según el estudio, el interés por viajar sigue creciendo mes a mes.

Hasta ahora, el turismo ha aguantado el estoque de la inflación y las turbulencias macroeconómicas, pese a que los precios no han parado de crecer en los últimos meses. Poco a poco, las aerolíneas van recuperando las rutas y las plazas ofertadas antes del covid y los alojamientos empiezan a superar la ocupación de 2019. De hecho, la temporada de invierno, que no deja de ser una época de poca actividad para el sector, cerró con una ocupación un 2% más alta que el año previo a la crisis sanitaria.

El incremento de los vuelos con origen y destino a España ha permitido la recuperación de los turistas internacionales, que ya registran niveles históricos, representando el 44% de los viajeros que se alojaron en el país en los primeros meses del año. El mercado británico es el que ha tenido un mayor comportamiento: los turistas procedentes del Reino Unido ya tienen una representación más alta que ante de la pandemia.