El auge de los hoteles de lujo: prevén 90 aperturas en cinco años y lideran el aumento de ocupación
Los hoteles de cinco estrellas concentraron el 37% de la inversión hotelera en 2022 por la polarización del sector hacia el segmento más selecto
Vista de la fachada exterior del hotel Pestana CR7 Hotel. EFE/Javier Lizón
El turismo de lujo es resiliente. Las cadenas hoteleras de alta gamma han sufrido, como todo el sector, los meses de cierre y ceses de actividad durante la pandemia, pero su público menos sensible a las subidas de precios y su gran capacidad inversora las ha permitido salir con mayor facilidad del pozo que supuso la crisis sanitaria. A la espera de volver a situarse en el mismo punto que en 2019 este año, los hoteles de cinco estrellas lideran la inversión hotelera y la recuperación de la ocupación por habitaciones.
Según datos de la consultora inmobiliaria CBRE, se prevé que antes de 2028 se abran en España hasta 90 nuevos establecimientos de cinco estrellas y gran lujo (GL), tras cerrar 2022 con alrededor de 327 hoteles de este segmento. Por categoría, se espera que aproximadamente un 25% sean GL y que en torno a un 70% se ubiquen en regiones de costa. El peso cada vez más creciente de los hoteles premium es consecuencia del proceso de polarización que está viviendo el sector hotelero a favor del segmento de lujo y ultra lujo.
En este sentido, las aperturas no son nada nuevo, y es que el sector ha aprovechado los años de cierre para hacer obras y alzar nuevos centros: España ha concentrado 60 aperturas de alta gama entre 2019 y 2022, el 40% en 2021. Casi la mitad de las inauguraciones hechas en este periodo fueron en las Islas Baleares, el destino favorito de los inversores del sector.
Estas aperturas, sumados al fin de las restricciones de movilidad, han ayudado a impulsar el incremento de las reservas. Ni el lujo ni el resto del turismo ha llegado aún a las cifras de 2019, pero los hoteles de cinco estrellas son los que registraron mayores crecimientos a cierre de 2022, según los datos del INE. Mientras que, de media, el incremento de la ocupación por habitaciones se queda en un 33% entre 2021 y 2022, los hoteles cinco estrellas ya rozan incrementos del 36%, seguido de los de una estrella.
En términos absolutos, los que están más cerca de colgar el cartel de ‘completo’ son los de tres y cuatro estrellas, con ocupaciones del 67% y del 71%, mientras que los de cinco se quedaron en un 65%. En los tres casos, el regreso de los turistas internacionales ha jugado un gran papel en el incremento de las reservas, destacando como los principales países emisores Reino Unido, Alemania y Francia.
Sube los precios por encima de la media
Su particular mercado más inelástico, sumada a la demanda contenida durante la pandemia, permite a las marcas de lujo incrementar los precios con mayor libertad. En este sentido, el índice de precios hoteleros del instituto estadístico ha aumentado en un 9,5% interanual en los establecimientos más selectos, mientras que de media se queda en un 7,8%.
Todos estos factores han disparado la rentabilidad de los hoteles de cinco estrellas en un 23% interanual, lo que ha mejorado su capacidad inversora. De hecho, los hoteles más selectos representaron en 2022 el 37% de la inversión total en el sector hotelero, hasta alcanzar los 1.154 millones de euros, según CBRE. España se ha posicionado en los últimos años como destino de los hoteles de gama alta, alcanzando cada año volúmenes de inversión crecientes en este segmento.
En palabras de Gustavo Cumella, Director Hoteles CBRE, “el buen clima, la amplia oferta gastronómica de calidad o la variedad de destinos, tanto vacacionales como urbanos, convierten a nuestro país en una de las regiones preferidas para las aperturas de lujo de muchas marcas hoteleras, sobre todo internacionales”. Cumella recuerda que en España tradicionalmente ha habido poca penetración de marcas internacionales en el segmento lujo, por lo que queda mucho recorrido a explorar.
En conjunto, los hoteles se situaron como uno de los activos más dinámicos en España durante el 2022, concentrando el 18% de la inversión inmobiliaria total con 3.119 millones de euros. Este dato supone la mayor cifra inversora de los últimos cuatro años, por encima de la media registrada desde 2015. En activos, durante el año pasado, se transaccionaron 158 hoteles y 18.296 habitaciones, frente a los 121 hoteles y 17.532 habitaciones del año anterior.
