Eduardo Rojas (Licuas): “Hemos hecho de la innovación nuestro motor de crecimiento”

Drones, robots, big data o IA. Incluso en sectores tan aparentemente tradicionales como la construcción, hay espacio para la innovación. Y mucho. En España, la compañía Licuas ha hecho de la investigación y las nuevas tecnologías la palanca del éxito.

Con 40 años de trayectoria, más de 1.200 profesionales y proyectos en España pero también en países como Qatar o Colombia, Licuas se ha convertido en referencia gracias a innovaciones como la tecnología que permite reparar hasta 500 metros lineales de tubería sin abrir aparatosas zanjas.

Actuaciones urbanas como la remodelación de la madrileña Puerta del Sol, la reordenación de los Jardines de Sabatini o la peatonalización del casco histórico de Alcalá de Henares, infraestructuras verdes, energías renovables o la digitalización en el mantenimiento del ciclo del agua son otras de las áreas en las que destaca.

“Hemos hecho de la innovación nuestro motor de crecimiento”, relata el CEO de la compañía, Eduardo Rojas Martín en una entrevista enmarcada en el proyecto ‘Historias de innovación, historias de éxito’ de Economía Digital y Banco Sabadell que recopila la experiencia de empresas que destacan especialmente por su mirada innovadora y su apuesta por la alta tecnología.

Tecnologías punteras

Comprometidos con el medio ambiente y la sostenibilidad, entre sus tecnologías más punteras destaca la mencionada rehabilitación de tuberías sin apertura de zanjas que, si bien tienen la eliminación de las molestas obras para los ciudadanos su principal exponente, ofrecen otras ventajas interesantes, entre ellas “la reducción de residuos de construcción, el desarrollo de nuevos áridos y la reducción de emisiones de CO2 y de ruidos”.

Dentro de este campo, además, Licuas ha desarrollado unos cajones térmicos que permite impregnar mangas y resinas en sus instalaciones de Madrid, transportarlas a cualquier parte de España, mantenerlas con hielo durante 48 horas y evitar que la resina polimerice, permitiendo así ejecutar las obras de manera rápida, limpia y eficiente en cualquier lugar.

Entre sus servicios a las ciudades, han desarrollado también diferentes aplicaciones con sistemas de telecontrol que permiten monitorizar el mantenimiento y así evitar desplazamientos innecesarios de personal, un desarrollo que aplican ya al contrato de conversación de fuentes ornamentales de la ciudad de Madrid.

El objetivo, apunta Rojas, pasa por “aplicar la transformación digital a cualquier trabajo de mantenimiento de la ciudad”.

También entre sus proyectos destaca la gestión del mayor tanque de tormentas de Europa en el Canal de Isabel II, también en Madrid, una infraestructura “fundamental” para la ciudad porque recogen las aguas más contaminadas, que son las del primer periodo de lluvia, las mantiene, las depura y, ya limpias, las vierte a la red.

El reto de la digitalización

Pese a las reticencias del sector, los esfuerzos en transformación digital en Licuas solo arrojan resultados positivos. Además de ayudar a automatizar procesos diarios, la incorporación de tecnologías como la IA, robots, drones, big data e IoT (internet de las cosas por sus siglas en inglés) es ya una realidad en la compañía.

Así, por ejemplo, emplean robots dotados de IA para la inspección de tuberías en alcantarillado capaces de realizar por sí mismos informes, drones para visitar colectores o aplicaciones para tener información en tiempo real de los trabajos que están desarrollando los operarios.

Tecnologías que han permitido simplificar y reducir tiempos en determinados trabajos o reducir el papel a cero, avanzando así en prácticas de sostenibilidad.

Escuela de talento

La gestión del talento es, hoy en día, un aspecto crucial para la compañía, sostiene su CEO. En el momento actual, de “tremenda movilidad y una oferta muy importante, lo primero que intentamos es retener el talento que ya tenemos”.

Dentro de la empresa, además, se realizan numerosos cursos de formación entre el propio personal: “decimos que somos una escuela de formación y, como los equipos de fútbol, tratamos de encontrar en nuestra propia cantera el personal que necesitamos”.

Internacionalización

Presentes en Colombia, Qatar y Polonia, el peso de la actividad internacional en Licuas ronda actualmente el 10%, frente al 25% que ha llegado a suponer en épocas de crisis en el mercado español.

“Ahora mismo estamos muy centrados en el mercado nacional porque consideramos que España tiene un gran potencial.

Entre los principales proyectos a nivel internacional, están la rehabilitación de cientos de kilómetros con su propio sistema de reparación sin zanjas o la construcción y explotación en Colombia de una unidad de cuidados intensivos y otra de radiología

En España, además, Licuas opera en el sector de la ingeniería civil con obras marítimas con actividades de dragado, construcción de diques, varaderos y puertos deportivos (han construido más de 550 amarres); construcción y mantenimiento de carreteras; edificación; infraestructuras verdes; movilidad; energías renovables y eficiencia energética; servicios aeroportuarios, tanto en el lado tierra como en el lado aire; y el estudio, diseño, construcción, mantenimiento y explotación de aparcamientos y campos de golf.

Acceso a la financiación

En la consecución de sus objetivos, tanto pasados como futuros, Rojas señala la financiación como un aspecto crucial.
“Contar con un partner financiero adecuado es absolutamente fundamental para nosotros” explica.

Y es que más allá de aportar el capital necesario para afrontar los retos que nos proponemos, “nos ofrecen asesoramiento, contactos y la posibilidad de acceder a un mercado global”.