Grifols reduce un 46% sus beneficios por la compra de Biotest
Los gastos financieros derivados de la adquisición de la compañía alemana reducen el beneficio neto de la farmacéutica hasta los 143,6 millones de euros, pero consigue remontar las ventas hasta los 2.810,1 millones
Semestre de luces y sombras para Grifols. Mientras que la farmacéutica especializada en hemoderivados consiguió su objetivo de reactivar sus ingresos después del golpe de la pandemia por el incremento de las donaciones de plasma, perdió un 46% de su beneficio neto en los primeros meses del año respecto al 2021 por el impacto de la compra de Biotest. De enero a junio, la compañía dirigida por Víctor y Raimon Grifols ganó 143,6 millones, 123,6 millones menos que en el mismo periodo del año pasado.
Según ha informado la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), esta disminución se debe al mayor gasto financiero derivado de la compra de la compañía almena, de la cual la multinacional catalana ya controla el 69,8% del capital, tras haber invertido 1.453 millones de euros. Esta adquisición tiene como objetivo mejorar la capacidad de producción en Alemania y desarrollar proyectos clave de I+D.
La compra de Biotest, por la cual Grifols lanzó una emisión de bonos de 2.000 millones de euros, sumado al impacto de la pandemia sobre el ebitda en los últimos 12 meses, provocaron, además, que la deuda neta de la cotizada alcanzara los 8.994,1 millones. Esto sitúa su ratio de apalancamiento en 8,8x, sin tener en cuenta los tipos de cambio. Aun así, la compañía reitera que no tiene que hacer frente a vencimientos de deuda ni anticipos significativos hasta 2025.
Grifols mantiene su «firme compromiso con el desapalancamiento, apoyado por los sólidos fundamentales del negocio, la mejora de la rentabilidad y de la generación de caja operativa», según detalla en un comunicado. En este sentido, cuentan con una «sólida posición de liquidez», que alcanzó 1.611 millones a de euros a 30 de junio de 2022.
El ebitda también se vio reducida respecto a los primeros meses de 2021, pero en menor medida. Este año, alcanzó los 618,3 millones de euros, 617,9 sin tener en cuenta las aportaciones de Biotest, respecto los 634,5 millones que obtuvo los primeros meses de 2021. Aun así, mostró una positiva evolución en comparación con los 327 millones de euros del segundo semestre de 2021.
Se reactiva la división de Biopharma
En una nota más positiva, Grifols logró remontar las ventas después del fuerte impacto por el coronavirus que redujo las donaciones de plasma, su principal materia prima. De enero a junio, su cifra de negocio llegó a los 2.810,1 millones impulsados por “el sólido crecimiento de Biopharma, la fuerte y sostenida demanda subyacente, la consolidación de Biotest y la evolución favorable de los tipos de cambio”.
De hecho, los ingresos totales, que aumentaron un 10,8% respecto al año pasado o en un 3,4% excluyendo los tipos de cambio, los aportó en su mayoría por la división de Biopharma. Esta línea de negocio creció hasta los 2.312,9 millones, un poco menos, hasta los 2.214,6 millones, si se excluye la aportación de Biotest. Estos negocios fueron de los más afectados por la crisis sanitaria, lo que favoreció que una vez dejada atrás la pandemia creciera un 8,3% respecto al 2021.
En este sentido, este negoció se vio catapultado por la aceleración de las donaciones de plasma, que aumentaron un 22% hasta la fecha y ya se sitúa en niveles pre-covid, según Grifols. La farmacéutica espera acelerar esta tendencia en el segundo semestre gracias a la incorporación de nuevos centros de plasma, los mayores volumen en sus centros tradicionales y a las mejoras tecnológicas.
La farmacéutica espera acelerar las donaciones de plasma en el segundo semestre
Sin embargo, los ingresos de su división de productos para hacer diagnósticos no corrió la misma suerte. Cayó un 21% hasta los 329,4 millones en el primer semestre por la finalización de las ventas no recurrentes del test molecular para la detección del covid. Sin contar este factor coyuntural, la bajada se reduce hasta un 5,2% por el cese de la obligatoriedad de realizar pruebas del virus Zika en las donaciones de sangre y plasma.
La línea Bio Supplies de la cotizada, que suministra material biológico para la investigación, también cayó, en su caso un 8,2% hasta los 52,6 millones por las menores ventas de albumina y la fracción V para uso no terapéutico. Por último, su antigua división hospitalaria y las ventas de plasma a terceros se contrajeron un 13%.