Google dice que no espera beneficios de su inversión millonaria en Madrid
La multinacional norteamericana insiste en que sólo busca ayudar a la comunidad, pero Europa sospecha que quiene mejorar su imagen por no tributar
Mary Grove es la estrella del South Summit 2014, un encuentro de emprendedores que se celebra esta semana en Madrid y que espera reunir a 5.000 visitantes. El acto de hoy también ha servido de marco para que Google anuncie oficialmente la instalación en Madrid de su tercer campus mundial el año próximo para apoyar a los emprendedores y desarrollar las start-ups.
Grove ha acaparado la atención de gran parte de los asistentes, que la acosaban por los pasillos, la perseguían en las cafeterías y la llenaban de tarjetas de presentación. La alta ejecutiva de la multinacional estadounidense quiere difundir la idea de que Google instalará un centro tecnológico y de negocios de alta capacidad sin esperar recibir nada a cambio.
“No queremos ganar dinero con esto. Es un aporte de Google a la comunidad, para ayudar a que los emprendedores españoles puedan tener una plataforma de negocios global. Tampoco queremos aprovecharnos del conocimiento que allí se genere. Utilizaremos los recursos del centro como cualquier otra empresa”, explica la directora de Google para Emprendedores a Economía Digital.
Las dudas de Europa
La ejecutiva dice que el campus de Madrid no será, ni mucho menos, una sucursal menor. Tendrá las mismas dimensiones que el campus de Londres que ha reunido en un año a 70.000 participantes y ha creado casi 600 puestos de trabajo con la ayuda de 274 empresas nacientes. También contará un socio local aún no seleccionado que se encargará de la gestión del recinto y estará abierto las 24 horas. Modelo Silicon Valley.
Los gobiernos de Madrid y el de España parecen estar confiados de las buenas intenciones de la multinacional (el presidente autonómico, Ignacio González, y el ministro de Industria, José Manuel Soria, se deshicieron en elogios con la iniciativa de Google) pero Europa no le cree. “Google no hace algo por nada”, declaró la vicepresidenta de la Comisión Europea, Neelie Kroes, ante la sonrisa congelada de la alta directiva de Google.
Algunas empresas ven en la inversión de Google un guiño al Gobierno y a Europa que estudian la forma de obligar a las grandes multinacionales tecnológicas a pagar más impuestos. Empresas locales como Idealista han denunciado en público que pagan más impuestos en España que Google, Microsoft y Yahoo juntas.
¿Emprendedor o funcionario?
El encuentro que reúne de emprendedores, inversores y grandes multinacionales como Google es capaz de transformar al menos por unos días la imagen de España de país líder en paro, con la mitad de sus jóvenes desempleados, en un polo de oportunidades y emprendimiento. Al menos esa es la convicción que dicen tener las empresas invitadas al evento. Google asegura que España es un país de start-ups. La ejecutiva dice que hay más de 3.000, algo que ha impresionado a Grove.
Pero el ministro Soria ha sido este miércoles más realista. “Muchos jóvenes quieren ser funcionarios y hay que cambiar esa mentalidad porque el Estado tiene que tener una dimensión limitada para permitir el crecimiento de iniciativas privadas”, dijo en su discurso. Es decir, asegura que hay que hacer cambiar de idea a quienes quieren ser trabajadores del Estado, como él.