Los audios de Villarejo acercan a FG a la puerta de salida de BBVA
La presidencia de honor de Francisco González está en jaque tras las revelaciones sobre la contratación de la empresa del comisario Villarejo en 2006
El pánico brota en la cúpula de BBVA. Las filtraciones de esta semana, sobre la contratación y los servicios prestados a la entidad por la firma Cenyt en 2006, de la que es propietario José Manuel Villarejo, podrían arrebatar a Francisco González la presidencia de honor del banco y la Fundación BBVA.
El viernes, la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) abrió una investigación para comprobar si hubo riesgos patrimoniales en las cuentas de BBVA y en sus propios sistemas de seguridad. Villarejo, a través de Cenyt, presuntamente espió a políticos, empresarios, abogados y reguladores por encargo de BBVA, para frenar la entrada de Sacyr en su capital.
Y González «ha quedado muy tocado con las últimas revelaciones de Villarejo», afirman fuentes cercanas al consejo de BBVA consultadas por El Confidencial. «Que (González) quede hundido dependerá de que sigan saliendo nuevas informaciones en los próximos días», agregaron. «Es cuestión de tiempo», declaró otro banquero al mismo medio.
González dejó la presidencia ejecutiva de BBVA en diciembre, provocando el ascenso de Carlos Torres Vila, pero mantiene sus puestos de honor en la entidad.
BBVA celebrará su primer consejo sin González el 21 de enero
Las repercusiones legales que el caso podría tener asustan a los consejeros y directivos, un escenario que abre una puerta que hasta hace unos días parecía permanentemente cerrada: la retirada de González. El consejo se reunirá el 21 de enero, y será la primera vez que lo haga sin su presencia, por lo que su futuro depende de lo que suceda en estos días.
Su puesto también dependerá de lo que finalmente diga la investigación interna que BBVA abrió en junio de 2018 por la contratación de Cenyt. Aunque esta investigación ya provoca dudas, en el tanto una de las áreas que supervisa el análisis (auditoría interna) es dirigida desde diciembre por Joaquín Gortari, uno de los hombres de confianza de González.
BBVA sostiene que su ex presidente nunca se reunió ni habló con Villarejo, pero también afirma que, «si en las investigaciones se acreditara la existencia de irregularidades», tomará «las medidas internas que procedan y llevará a cabo las acciones judiciales pertinentes». La entidad asegura que colaborará con la Justicia.