González-Bueno (Banc Sabadell): «La Sareb ha cumplido su función; la banca está de salida»
Su discurso se alinea con el de Luis de Guindos, que defiende la utilidad de la Sareb tras la crisis para ayudar a la banca a recuperarse
El consejero delegado del Banc Sabadell, César González-Bueno se ha mostrado claro este miércoles durante su participación en los cursos de verano organizados por la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE), en la Universidad Menéndez Pelayo de Santander, «la Sareb ha cumplido su función, el proceso de salida de la banca está en marcha».
El CEO de la entidad catalana ha explicado que el banco malo fue un instrumento «clave» para ayudar a la banca a salir de la crisis financiera, pero su función «está cada vez más ejecutada». El pasado mes de marzo se conoció que los 35.000 millones de deuda pendiente de esta sociedad computarán en las cuentas públicas a partir de ahora.
Un movimiento que se producía porque Eurostat llevaba tiempo pidiendo una reclasificación para que Sareb se alineara con lo que han hecho otras entidades similares en Europa y para que todas siguieran las mismas normas contables.
Desde entonces, se empezó a valorar la salida de la banca del accionariado y la reorganización del consejo de administración. Algo que se producirá más pronto que tarde, según han ido confirmado algunos banqueros durante estos tres meses.
Las palabras de González-Bueno se alineaban con las del vicepresidente del Banco Central Europeo, Luis de Guindos, que también ha defendido en estas jornadas la utilidad de la Sareb para ayudar a la recuperación de la banca y en consecuencia, de la economía española, que ha crecido por encima de la media tras la crisis.
«La Sareb, bancos malos, o compañías de gestión de activos se han utilizado en todos lados. En 2012 había muchos créditos inmobiliarios dudosos, mal valorados y la Sareb fue un instrumento útil«, apuntaba.
En este sentido, recordaba que la supervisión la hicieron el Fondo Monetario Internacional, el Banco Central Europeo y la Comisión Europea de acuerdo con el rescate bancario de España y después, estuvo controlado por el Banco de España.
También ha amparado que la deuda de la Sareb empiece a computar como deuda pública. En su opinión, la sociedad «debe recuperar el ritmo de venta de activos que tenía antes de la pandemia y así podrá reducir los 35.000 millones de deuda».
Con estas palabras respondía a la vicepresidenta segunda del Gobierno, Nadia Calviño que durante estas jornadas señaló que la Sareb era una «herencia» de la anterior crisis y que ahora el Gobierno había tenido que reclasificar las cuentas públicas. Asimismo, explicaba que buscaban mejorar su operativa para responder «al interés general» y maximizar las ayudas públicas que se dieron al sector financiero.