Golpe a Nespresso: Francia le obliga a abrir el mercado de las cápsulas monodosis
La compañía comunicará las adecuaciones técnicas de sus máquinas para evitar una sanción del regulador
Nespresso ha recibido un duro golpe del regulador de la competencia francés, la Authorité de la concurrence. La institución le insta a abrir el mercado de las cápsulas monodosis en el país. Ahora, tendrá que comunicar a sus competidores las modificaciones técnicas de las máquinas antes de que salgan al mercado y a mantener la garantía de las cafeteras que se estropeen aunque usen otras marcas, excepto en caso de “incompatibilidad evidente”.
El gigante de Vevey (Suiza) ha propuesto al regulador dar este paso para satisfacer los problemas de competencia identificados. La firma saca pecho de la “colaboración” ofrecida, aunque el aviso que le ha lanzado la autoridad francesa deja poco margen a cualquier otra actuación. Si Nespresso intenta neutralizar de nuevo a sus competidores, aunque sea al transmitir una mala imagen en un anuncio publicitario, se enfrentará a una multa ejemplar. Podría alcanzar el 10% del volumen de negocios del grupo en todo el mundo, que ronda los 7.500 millones de euros.
Revisión de condiciones
De hecho, el regulador realizará un test de mercado en un mes para comprobar si la firma y sus competidores se han adaptado a la nueva situación. La Authorité de la concurrence se reserva el derecho de “modificar y complementar los compromisos contraídos con Nestlé [la sociedad madre]” y de iniciar “el clásico litigio” si la pugna entre empresas no remite.
Litigios por plagio
La decisión del organismo galo es un nuevo intento de dar por zanjada la llamada guerra del café que ha enfrentado a Nespresso con los grupos Marcilla (L’Or Espresso, de Sara Lee) y Ethical Coffe Company, principalmente.
El grupo suizo –también litiga en su país de origen– acusó de plagio a sus competidores quienes, a su vez, cargan contra la empresa por bloquearles la entrada en el mercado. Por el momento, la marca de Nestlé acumula reveses judiciales. Los tribunales han considerado que el mercado de las cápsulas de café monodosis es libre y les ha obligado a modificar sus prácticas.
La Justicia de lo Mercantil de Barcelona, donde está la central de Nestlé España, tiene pendiente resolver el litigio en España. El entorno de la compañía no espera que la decisión difiera mucho a las reflexiones de los tribunales franceses.