Goldman Sachs no participará en la junta de DIA

Goldman Sachs muestra sus cartas cuatro días antes de la junta de accionistas de DIA. El banco de inversión ha desvelado que no tiene intención de decantarse por ningún bando (el magnate ruso Mikhail Fridman o el consejo de administración), de acuerdo a la información comunicada al cierre del mercado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

«De acuerdo con nuestra práctica general, confirmamos, según lo requerido, que Goldman Sachs no ejercitará ni cederá los derechos de voto vinculados a las acciones de DIA de su titularidad», ha indicado en un hecho relevante.

El comunicado llega diez días después del toque de atención de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) al banco estadounidense por sus movimientos en el capital de DIA.  El supervisor comunicó a Goldman Sachs que debía aflorar cuál era su posición real en la cadena de distribución, ya que estaba colaborando en la opa lanzada por Mikhail Fridman a través de Letterone, primer accionista de la compañía con el 29% del capital. 

Este requerimiento, que trataba de esclarecer qué posición exacta tenía DIA en la cartera de Goldman Sachs, llegó a falta de quince días de la celebración de la junta de accionistas de la cadena de supermercados, que será decisiva para el futuro de la compañía.

La junta de accionistas someterá a votación dos propuestas: la del consejo de administración, que propone una ampliación de capital de 600 millones garantizada por Morgan Stanley, o la de Fridman, que opta por una ampliación de capital de 500 millones siempre y cuando se acepte su opa sobre DIA a 0,67 euros. 

Esta junta de accionistas llegará el 20 de marzo, en segunda convocatoria. Tal y como comunicó la compañía en un hecho relevante, la primera convocatoria será el día anterior, el 19, aunque en su comunicación la cadena de supermercados explica que «previsiblemente» será en la segunda cuando se sometan a debate todos los puntos contenidos en un un nutrido orden del día.

La CNMV, sobre Goldman Sachs: «Tiene que ser neutral»

El regulador requirió más información a Goldman Sachs porque, según apuntaron fuentes cercanas, debía «ser neutral». 

Las sospechas sobre el papel de Goldman Sachs en la opa de Letterone sobre DIA siempre han estado sobre la mesa. El banco estadounidense redujo a finales de febrero su participación en DIA desde el 5,69% a un mínimo testimonial del 0,1%.

No obstante, un poco más tarde, durante este mes de marzo, Goldman Sachs volvió a reforzarse en el capital de la cadena de supermercados, hasta tener cerca del 4,279% de la cadena de supermercados, sumando participaciones directas e indirectas.

Fuentes del mercado señalaban que el modus operandi entre Goldman Sachs y Letterone era la cesión de participaciones a inversores bajistas — accionistas que invierten con la esperanza de que una compañía caiga para así ganar dinero— , llevando a la compañía a desplomarse en bolsa, para que más tarde el fondo luxemburgués de Fridman pudiera quedarse con la compañía a precio de saldo.

Los mismos testimonios siempre apuntaron a que Goldman Sachs y Letterone estaban unidos a través de un directivo. Se trata de Michael Casey, especializado en fusiones y adquisiciones en el sector minorista. Casey trabajó en Goldman Sachs y fichó por Letterone poco antes de que se iniciara la ofensiva de los hombres de Fridman sobre DIA.