Industria urge a los fabricantes de coches a presentar los proyectos del Perte 2 antes del 23J
El Gobierno espera abrir la ventanilla para formalizar las solicitudes del 1 al 15 de julio, pese a no tener aprobada todavía la convocatoria final
La convocatoria electoral obliga al Gobierno a acelerar los trámites del segundo Perte del Vehículo Eléctrico y Conectado (VEC). Las empresas de la cadena de valor del sector automovilístico tendrán poco más de un mes para cerrar sus proyectos y presentar las solicitudes para optar a las ayudas públicas antes de las elecciones del 23 de julio. El ejecutivo quiere abrir la ventanilla entre el 1 y el 15 de julio, pese a no tener todavía la convocatoria aprobada.
Este jueves, el secretario general de Industria, Francisco Blanco, y el comisionado para el Perte VEC, José María López Martínez, se han reunido de forma virtual con las empresas automovilísticas interesadas para trasladarles por fin los detalles técnicos de las bases de la segunda convocatoria y conseguir repartir los más de 2.200 millones de euros que quedaron pendientes en la primera edición de las ayudas.
Según fuentes del sector, las compañías deberán de presentar las solicitudes en la primera quincena de julio, con el fin de poder entregar todo el monto antes del 15 de setiembre. De esta forma, la primera asignación quedará en manos de un Gobierno en funciones de Pedro Sánchez, dado que, sea cual sea el resultado, todo apunta que las negociaciones para formar un equipo de gobierno impedirán tener un nuevo ejecutivo apenas dos meses después de los comicios.
Durante el encuentro, los representantes del ministerio encabezado por Héctor Gómez han insistido en que la documentación presentada es un borrador sujeto a cambios, por lo que han abierto un buzón para que las empresas puedan trasladar sus dudas. Está previsto que se celebre una segunda reunión el día 14 de junio para resolver las cuestiones planteadas. En este escenario, el Gobierno apenas tendría dos semanas para aprobar de forma definitiva las bases de las ayudas y publicar la orden ministerial que la oficialice, dejando a las automovilísticas pocos días para estudiar las condiciones finales antes de entregar la documentación.
Una línea para baterías
De cumplir con este calendario, Moncloa tramitará las propuestas por orden de llegada este verano, para poder transferir las ayudas cuando antes. En este sentido, no es solo la convocatoria electoral y un posible cambio de gobierno quien le pisa los talones, también Bruselas: los fondos europeos se deben de trasladar a sus beneficiaros el mismo año en que son presupuestados. «Tienen prisa», aseguran desde la automoción.
A diferencia de la primera convocatoria, donde apenas se repartió el 30% del monto presupuestado, esta segunda cita se dividirá en dos líneas, la primera de 837 millones de euros destinados a la fabricación de baterías para coches eléctricos y una segunda de 1.475 millones para proyectos individuales que debería de abrazar a los distintos eslabones de la cadena de valor del vehículo eléctrico. La primera ya ha sido aprobada por la Comisión Europea, a la espera de cerrar algunos detalles, mientras que la segunda se debería de anunciar este mes de junio.
La apertura del Perte a iniciativas individuales ha causado expectación dentro del sector, hasta el punto que se ha tenido que abrir una segunda vía de comunicación en plena videoconferencia porque la sala virtual había alcanzado su cifra máxima de asistencia, de 500 personas. Más allá de los principales fabricantes como Seat, Stellantis o Mercedes, cuyos proyectos tractores protagonizaron el Perte 1, en esta edición se puede presentar cualquier sociedad con un proyecto destinado a transformar sus actividades hacia la fabricación de coches eléctricos o sus componentes.
Sobre estos grandes fabricantes, tienen la vista puesta en las ayudas para producir baterías, ya que deberán de acercar la fabricación de las celdas de las pilas, que pueden pesar alrededor de 300 kilos, a las líneas de producción de sus vehículos. Es el caso de Seat, que ha fiado la instalación de una planta par ensamblar estos componentes dentro de su fábrica de Martorell (Barcelona) a las ayudas del Perte 2.
Tras el fiasco del primer Perte, el Gobierno se comprometió a flexibilizar esta segunda convocatoria, sobre todo en lo que refiere al calendario de ejecución de las inversiones, un requisito que dejó fuera de la primera edición al proyecto de electrificación de la fábrica de Ford en Almussafes (Valencia). Se trata de una condición que dictamina la Unión Europea, lo que ha obligado tanto el Gobierno como las asociaciones empresariales que representan al sector en España a demandar que se pueda alargar esta fecha del año 2026 al 2028. Todos estos matices se conocerán oficialmente cuando se aprueben las bases finales.