Ghosn seguirá en prisión hasta el 11 de enero
Se prolonga el arresto del ex presidente de Nissan diez días, hasta el 11 de enero, por la nueva acusación por violación de confianza agravada
Diez días más de lo esperado. Eso es lo que ha decidido un tribunal de Tokio que va a prolongar la detención del expresidente de Nissan Motor. Así, Carlos Ghosn, detenido por delitos vinculados con la declaración de sus ingresos y una presunta violación de confianza de la compañía, estará en prisión hasta el 11 de enero de 2019.
La extensión del arresto está vinculada una nueva acusación por supuesta violación de confianza agravada por buscar que Nissan asumiera una serie de pérdidas de inversiones personales, que en principio iba a mantenerlo en prisión hasta el 1 de enero, antes de que el tribunal aprobara una extensión de 10 díass.
El empresario francobrasileño, de 64 años, permanece en prisión provisional desde el 19 de noviembre por supuestamente ocultar a las autoridades ingresos millonarios acordados con la compañía desde 2011.
El encarcelamiento de Ghosn ha generado críticas en el extranjero ante la posibilidad de que la normativa japonesa permita prolongarlo indefinidamente y por la particularidad del sistema nipón de permitir realizar los interrogatorios sin presencia de un abogado.
Sobre Ghosn pesan hasta la fecha tres órdenes de detención, sólo una de ellas con acusación formal, por la presunta ocultación de ingresos fijados entre 2011 y 2015.
63 millones de euros
Está pendiente que la fiscalía adopte decisiones sobre la segunda orden de detención, relacionada con los ingresos fijados entre 2015 y 2018, así como la tercera orden sobre la violación de confianza.
La supuesta ocultación de remuneraciones de Ghosn afecta a unos 8.000 millones de yenes (63 millones de euros) entre 2011 y 2018, y también es sospechoso de buscar que Nissan asumiera pérdidas millonarias de una empresa suya por inversiones con derivados financieros a raíz de la crisis de 2008.
Junto a Ghosn fue detenido también Greg Kelly, ex director representativo de Nissan y un estrecho colaborador del expresidente que le habría ayudado a ocultar sus remuneraciones. El estadounidense, que negó los cargos, quedó en libertad bajo fianza el 25 de diciembre.
Kelly ocupaba las funciones de consejero de Nissan Motor y representante de la dirección, pero fue cesado en esas últimas funciones directivas después de su arresto, el pasado 19 de noviembre.
Kelly, que queda ahora a la espera del juicio, está acusado de diseñar una serie de medidas para ocultar supuestamente millonarios ingresos del hasta hace poco expresidente de Nissan.El tribunal fijó una fianza de 70 millones de yenes (557.000 euros) y se le impide salir del país.