Garrigues facturó 28.000 euros al Palau por el asesoramiento legal del sobrino de Mariona Carulla
La presidenta del Orfeó Català contrató al equipo de Joaquim Triadú para investigar la trama Millet. El afamado letrado cedió el protagonismo a Enric Carulla, que copó las asambleas de socios durante seis meses
Mariona Carulla, imputada por un presunto delito de evasión fiscal a través de Agrolimen junto a sus cinco hermanos, pagó al bufete barcelonés Garrigues un mínimo de 27.802,88 euros por el asesoramiento legal que prestaban el ex conseller de Presidència de la Generalitat, Joaquim Triadú, y el propio sobrino de la presidenta del Orfeó, Enric Carulla.
La misión de ambos, junto a otros letrados y auditores –en este caso de Deloitte–, era esclarecer la trama de corrupción que Fèlix Millet había urdido en el Palau de la Música para enriquecerse ilícitamente, según la investigación judicial en curso, y defender los intereses de la institución en el caso.
Garrigues desembarca en el Palau en diciembre de 2009 por petición expresa de la presidenta, que consideró que la experiencia de Triadú era una garantía adicional. Según los colaboradores cercanos consultados, no creyó, sin embargo, que el parentesco que mantiene con uno de los miembros del equipo de abogados, su sobrino, fuera ningún impedimento para contratar al bufete. Tampoco supuso ningún reparo para Triadú. Los trabajos de asesoramiento legal se prolongaron hasta julio de 2010.
La minuta que Garrigues giró el 8 de febrero de 2010 por los dos primeros meses de trabajo –diciembre de 2009 y enero de 2010– ascendió a 23.550 euros en concepto de honorarios más otros 428 euros por los gastos derivados. En total 27.802,88 euros (sumando el IVA) que el Orfeó pagó en marzo del mismo año, según la documentación a la que ha tenido acceso Economía Digital.
Protagonista en las asambleas
Mariona Carulla, convencida de la solvencia de Triadú y de Enric, presentó a su sobrino ante los socios del Orfeó como familiar suyo. A partir de ahí, el protagonismo del abogado fue in crescendo hasta el punto de que en la asamblea de presentación de las conclusiones de la auditoría, Enric Carulla desarrolló un turno de palabra mayor al del representante de Deloitte, encargado formal de revisar la etapa de gestión de Millet.
Enric Carulla es un reputado abogado penalista especializado en el ámbito empresarial. Se incorporó a Garrigues en 1999. En la actualidad es socio del bufete. El letrado no ha contestado las llamadas de este diario.
Triadú, por su parte, dejó el bufete Garrigues coincidiendo con la victoria de CiU en las últimas elecciones autonómicas. Actualmente, presta sus servicios en el área de administración pública del despacho barcelonés de Pricewaterhousecoopers.