Freixenet cierra el 2021 récord con 107,8 millones de botellas vendidas

A pesar del impacto de ómicron en la recta final del año, Freixenet superó las expectativas depositadas en 2021. Si el 1 de diciembre hablaba de alcanzar los 106 millones de botellas vendidas en toda la campaña, al cierre del ejercicio la cifra escaló hasta los 107,8 millones de unidades comercializadas. Con ello, la empresa consiguió colocarse como líder de mercado en volumen. No así en valor, que está en manos de Codorníu.

La empresa con sede en Sant Sadurní d’Anoia (Barcelona) explica a Economía Digital que terminó el año 2021 con una cuota de mercado en volumen –número de unidades vendidas– del 13% en el mercado español dentro de la categoría de espumosos. El porcentaje alcanzó picos de hasta el 19% durante la campaña de Navidad, según la consultora IRI. La cifra mejora los registros de 2019 y 2020.

Freixenet no explica los resultados de la empresa. Sin embargo, en la presentación del último anuncio navideño, Pedro Ferrer, consejero delegado de la cavista, señaló que el precio medio de la botella era ligeramente superior a los 5 euros. Con un cálculo rápido (107,8×5) se podría intuir una facturación que rondará los 540 millones de euros.

Los 107,8 millones de botellas son solamente los artículos comercializados bajo la marca Freixenet. Es la primera vez que la enseña supera los 100 millones de botellas comercializadas después de que el pasado ejercicio el número se quedase en 99,3 millones. La firma presume del liderato de productos como la gama Carta Nevada, Freixenet ICE o Freixenet prosecco.

A pesar de que la compañía propiedad de la familia Ferrer y la alemana Henkell lidera la categoría de volumen, no consigue repetir la primera posición en el segmento de valor –euros movidos–. Allí el número uno es el decano del sector, Codorníu. El grupo controlado por el fondo de inversión Carlyle ya presume de una cuota de mercado en valor del 33% del total en los supermercados –no existen cifras, dicen, en el segmento de la hostelería–.

La recuperación de Freixenet fuera de España

Tras un 2020 marcado por el cierre de la restauración, 2021 fue el año de la progresiva vuelta a la normalidad. La hostelería reabrió, aunque buena parte de la campaña todavía con restricciones, pero el cava, muy vinculado a las celebraciones, lo pudo aprovechar. En Navidades, donde se juegan el 30% de las ventas, solamente el pico de contagios de la variante ómicron aguó el récord de botellas comercializadas bajo la marca Freixenet.

Sin embargo, España solamente representa ya el 15% de las ventas del grupo. El 85% restante procede ya del mercado internacional, mucho más vinculado a los supermercados, que sufrieron menos por la pandemia. Mercados como Reino Unido y Brasil recuperaron el fervor rápidamente y ya se mueven en baremos previos a la Covid-19.

La recuperación llega con nuevos rostros en el consejo de administración. Freixenet afronta tres años después de la entrada de Henkell un nuevo baile de sillas en su capital. Como ya explicó Economía Digital, este mes de noviembre Dr. Oetker –matriz de Henkell– se escindió en dos mitades y el grupo espumoso quedó en manos de los tres hermanos del tercer matrimonio de Rudolf-August Oetker. Alfred Oetker, uno de los hijos, es el nuevo presidente de la cavista.

Freixenet invertirá 30 millones de euros en unas nuevas bodegas en Sant Sadurní d’Anoia

Los nuevos socios estuvieron en Sant Sadurní en noviembre y ya participaron en el campus semestral que realiza Henkell Freixenet. La primera inversión de la nueva etapa serán unas nuevas cavas en la localidad catalana con capacidad para más de 30 millones de botellas nuevas. «Hace falte conseguir más espacio y mejorar la eficiencia», dijo Ferrer en diciembre.

Aunque todavía no existe una cifra concreta, Freixenet invertirá más de 30 millones de euros en la obra, que sumará 15 millones de botellas de capacidad a la producción actual. El resto se llenará con botellas que procedentes de otras bodegas de terceros, contratadas ahora por la empresa.