Ford pasará la tijera por España en 2019
Las ventas del fabricante estadounidense en el Viejo Continente caen el 8,2% en septiembre y dentro de la empresa ya se habla de “grave crisis”
“Se tomarán decisiones difíciles y duras”, advirtió la cúpula europea de Ford a su red de plantas europeas. “Estamos ante una grave crisis”, señalaron días después los trabajadores. El fabricante estadounidense prepara fuertes recortes en la producción en el Viejo Continente para volver a ser rentable en 2019. Con las cifras aseguradas hasta final de este año, desde la instalación española de la compañía, en Valencia, ya esperan el tijeretazo con la llegada del mes de enero.
En un comunicado emitido el martes, el comité de empresa europeo alertaba de la “grave crisis”, pero pedía no culpar a los trabajadores de “los numerosos errores de la alta dirección”. Además, ya advertía del “ataque” que sufrirán los salarios del personal en lo que será una de las primeras medidas del plan de choque diseñado desde el cuartel general de la empresa, en Míchigan (Estados Unidos).
Mientras ven como la operativa se revisa planta por planta, los 7.800 empleados de la fábrica de Almussafes (Valencia) auguran tiempos difíciles, pero creen que la producción está asegurada hasta final de año. El secretario general de la UGT en la planta, Carlos Faubel, admitió que son conscientes de que caminan “hacia dificultades”. “Tendremos que soportar mucha presión de la dirección europea”, señaló.
No obstante, confía en aplacar el golpe hasta la entrada de 2019. “Tenemos garantizada una producción estable hasta final de año, y la plantilla está dimensionada para estas cifras”, defendió. Eso sí, de recortarse los números se generarían “muchos problemas, porque el 99% de la plantilla es fija”. «Lo que queremos es que la empresa nos diga la situación real a la que nos tenemos que enfrentar», reclamó.
“Los planes han caído como una sorpresa inesperada”, lamentó a Europa Press. “En los últimos años la fábrica había crecido mucho, pero ahora parece que se ha tomado una decisión en el sentido totalmente contrario hacia el que íbamos”, comparó.
La fábrica valenciana de Ford lleva años con problemas
El ajuste no será una novedad. La fábrica arrastra recortes desde 2015. Se acabó con los trabajadores eventuales y temporales y se aplicaron numerosas prejubilaciones. Los pactos laborales se incumplieron sistemáticamente.
El último acuerdo con la plantilla fue aprobado el pasado mes de enero y debía garantizar la tranquilidad en la planta hasta 2021. La empresa se comprometió a convertir en fijas a 304 personas en dos años y pactó con los sindicatos una subida de sueldo del 2,5% en el año 2019, del 1,5 % en 2020 y del IPC real más medio punto para el año 2021.
Además, las ventas de los modelos fabricados en Almussafes no acompañan. Las Provincias informó de que la producción en el primer semestre de 2018 es inferior a la del mismo periodo de 2017, con caídas del 44,19% en el caso de modelo S-Max (9.600 unidades) debido al viraje del mercado, que da la espalda a los monovolúmenes en favor de los SUV.
El Ford Galaxy también bajó el 27,7% (7.300 unidades) y el Kuga perdió el 20% de la producción (80.000 unidades). Mientras, la fabricación de la Conect descendió el 6,1% (56.000 unidades) y la del Mondeo, el 14,4% (56.000 unidades).