Foment y Pimec concretarán su unión después de las vacaciones
Los presidentes de ambas patronales insisten en que la primera fase de contacto se pretende cerrar antes del descanso estival
La unión entre Foment del Treball y Pimec se concretaría tras las vacaciones. La intención de las dos instituciones es cerrar la fase de conversaciones preliminares antes del descanso estival, según explican los presidentes de ambas patronales en declaraciones a Economía Digital. “Lo más importante a lo largo de todo este proceso de conversaciones es que se ha confirmado que es mucho más lo que nos une que lo que nos separa”, explica el máximo responsable de Foment, Joaquim Gay de Montellà.
El presidente de Pimec, Josep González, afirma el calendario “ideal” seria poner negro sobre blanco en septiembre. “Pienso que hay muchas posibilidades”, afirma. Reconoce que hasta la fecha “se han tocado los puntos que son más difíciles, pero avanzamos”. “Los objetivos más importantes son compartidos”, añade el presidente de Foment.
La crisis empuja
Ambos directivos también aseguran que el proceso se ha abordado “con una actitud abierta”, en palabras de Gay de Montellà. Aunque, según otras fuentes conocedoras de las negociaciones, en las últimas semanas se había enquistado y peligraba poder cerrar la primera fase, los contactos informales, antes de las vacaciones.
Ello ha coincidido con el incremento de la presión en los mercados de la deuda española, que ha provocado que reaparezca el fantasma de la intervención del país. “La situación actual de crisis y recesión nos pide a todos tener más capacidad de negociación que nunca”, puntualiza el presidente de Foment.
En cuanto a las incógnitas sobre la estructura organizativa y el futuro de las sedes territoriales, González asegura que los temores y las dudas internas son normales “en un proceso de estas características. También juega un papel importante saber cómo quedarán las sillas”. Unas incógnitas “que se disiparán cuando se plantee a fondo”.
La fuerza del interlocutor
También aplauden el proceso de unión los secretarios generales de CCOO y UGT en Catalunya. Joan Carlos Gallego y Josep Maria Álvarez dejan claro que son Foment y Pimec quienes tienen que decidir sobre su futuro. “Pero nos interesaría tener a un interlocutor patronal claro”, afirma el primero. Un extremo que comparte su homólogo en UGT: “Les deseo mucha suerte, ya que nosotros ganamos con un interlocutor fuerte, potente y representativo”.
Incluso Gay de Montellà está de acuerdo con este extremo. Augura que llegarán a buen puerto si “te olvidas de las cosas pequeñas o de los intereses más inmediatos y enfocas el objetivo hacia una visión más ambiciosa: promover unas organizaciones patronales que, con mucha unidad, representen a empresas, defiendan sus intereses y tengan una alta capacidad de interlocución en Catalunya, España y Europa”.