La filial de Iberdrola en EEUU pide anular la revisión de los contratos de energía de un gran proyecto eólico
Avangrid quiere que los contratos se vuelvan a ofrecer en abril de 2023 ante la inviabilidad económica actual del proyecto Commonwealth Wind, proyectado en Massachusetts
La filial estadounidense de Iberdrola, Avangrid, ha solicitado que se abandone la revisión de los contratos para la venta de energía de un gran parque eólico marino en Massachusetts (noreste de EEUU) al considerar que el proyecto no es viable en esos términos por la actual coyuntura económica.
En un comunicado, Avangrid ha explicado que ha solicitado a las autoridades del estado esta medida con el fin de que esos contratos se vuelvan a ofrecer en una convocatoria prevista para abril de 2023. Según la empresa, con este paso se aseguraría un «proceso competitivo que tenga en cuenta los cambios sin precedentes» que se han producido y que garantizaría que el proyecto pueda ser construido. A finales de octubre, Avangrid ya había pedido suspender un mes la revisión de los contratos de compra de energía para este parque eólico, conocido como Commonwealth Wind, mientras se buscaban formas de volver a hacer viable el proyecto.
«A pesar de desafíos sin precedentes en la economía global en forma de disrupciones en la cadena de suministro, niveles históricos de inflación y subidas de los tipos de interés, Avangrid ha mantenido discusiones de buena fe y productivas con funcionarios del estado de Massachusetts sobre estos desafíos y la necesidad de restaurar la viabilidad económica del proyecto», ha señalado la compañía en un comunicado.
1.232 megavatios y 4.000 millones de dólares
Avangrid ha reiterado que su objetivo sigue siendo construir la infraestructura, por lo que se muestra «decepcionada» por la negativa de las empresas distribuidoras de energía que habían firmado los contratos a renegociar. Según el proyecto de la filial de Iberdrola, está previsto que el parque cuente con una potencia instalada de 1.232 megavatios (MW) y que movilice una inversión cercana a los 4.000 millones de dólares.
Según Iberdrola, la nueva instalación se presenta como un proyecto «clave» para que Estados Unidos alcance la meta de llegar a los 30.000 MW de capacidad eólica marina en 2030.