FCC niega el pago de comisiones a Felip Puig
Koplowitz ordenó investigar la vinculación del grupo a una supuesta trama de adjudicaciones ilegales
FCC investigó internamente si alguno de sus directivos pagó al actual Conseller d’Industria de la Generalitat catalana, Felip Puig, para lograr adjudicaciones en municipios de Girona. Fue una de las primeras decisiones de la nueva presidenta, Esther Alcocer Koplowitz, tras tomar el testigo de su madre.
Las pesquisas se han cerrado con un dictamen negativo: el grupo no fue cómplice de Puig durante su etapa al frente de la Conselleria d’Obres Públiques. Desde esa posición, el político catalanista habría construido un entramado de intereses para lograr comisiones de las constructoras y empresas de servicios que aspiraban a operar en Catalunya.
Máxima discreción
Las revelaciones emanan de uno de los dossier de la agencia de detectives Método 3. Según el mismo, “[Puig] presiona a los alcaldes de su partido para que adjudiquen dichas obras o concesiones y FCC presenta ofertas a la baja asesorada por sus afines. Posteriormente, complementan su déficit económico en las ofertas con adjudicaciones directas que permite la ley”.
La investigación se llevó a cabo con la máxima discreción. El consejero delegado de FCC, Juan Béjar, no conocía los detalles de la operación interna.
Reestructuración
En paralelo a la averiguaciones, la nueva cúpula del conglomerado de servicios preparaba el plan estratégico para salir de pérdidas. El documento, presentado a los analistas este miércoles, prevé que el dividendo no vuelva hasta 2015. También habrá una factura en el capítulo laboral. Más de 1.000 empleados de la rama de construcción saldrán del grupo.
“Es duro llamarlo destrucción de empleo, pero es así”, según el propio Béjar. Esos puestos no se recuperarán. La intención de FCC es que el máximo de bajas posibles se articule con prejubilaciones. “La situación es muy dura y esperamos encontrar la flexibilidad adecuada entre los sindicatos”. FCC ha delimitado el perímetro del expediente de regulación (ERE) –ya iniciado– pero aún faltan detalles por conocer.
Dudas en cementos
Se ha decidido que la actividad cementera también despedirá. Cerrará una de las cinco plantas de producción que hay en España. Están en Catalunya (2) y País Vasco (3). “Dependerá de los costes de transporte hasta el cliente”. Para este negocio no hay previsto aún un número de despidos.
FCC provisionó el año pasado 60 millones para pagar las indemnizaciones. La filial de cemento, Portland, no ha realizado ningún apunte en este sentido. “Queremos apostar por la actividad, sólo cerraremos una factoría aunque todas funcionan el 25% de su capacidad”, destacó Béjar.
Deuda
El grupo de Koplowitz desinvertirá por valor de 2.200 millones para enjugar parte de los 5.000 millones en deudas. Este año tiene vencimientos por un valor mínimo de 600 millones.