Fainé y Brufau, imputados en el caso Villarejo por el espionaje a Del Rivero
El juez del caso Villarejo imputa a Isidro Fainé (Caixabank) y Antonio Brufau (Repsol) por el espionaje al expresidente de Sacyr, Luis del Rivero
El expresidente de Caixabank, Isidro Fainé, y el presidente de Repsol, Antonio Brufau, han sido imputados por el juez del caso Villarejo, Manuel García-Castellón, en la causa que investiga el supuesto espionaje al expresidente de Sacyr, Luis del Rivero, según adelanta este jueves El Confidencial.
La Fiscalía Anticorrupción pidió al juez instructor el pasado 10 de abril la imputación de los dos directivos que se ha hecho efectiva este jueves, solo cinco días después. Ni Caixabank, ni Repsol han querido hacer declaraciones a este medio.
La investigación trata de aclarar si Repsol y La Caixa encargaron al excomisario Villarejo entre 2011 y 2012 que espiara al entonces presidente de Sacyr porque pretendía tomar el control de la energética con la ayuda de la petrolera Pemex. Además, en un momento en el que La Caixa mantenía una participación relevante en Repsol.
En concreto, el juez indicaba en su auto que acudieron a Villarejo para desarticular «una estrategia de sindicación» por parte de Del Rivero «para asociarse con Petróleos Mexicanos (Pemex)» de cara a conseguir «casi un tercio» de las acciones de Repsol y acceder a su control.
Además de Fainé y Brufau, Anticorrupción pidió la imputación del ex secretario general y del consejo de administración de Repsol, Luis Suárez de Lezo; el ex director corporativo de servicios patrimoniales de la petrolera, Juan de Amunátegui; el ex director corporativo de gestión patrimonial, Joaquín Uris, y el ex director general de medios de Caixabank, Antonio Massanell.
Los pesos pesados del Ibex 35 se suman a la lista de imputados por el `caso Tandem´ tal y como ocurrió con Francisco González en 2019. El expresidente del BBVA fue acusado de contratar a Villarejo en 2004 para espiar a Luis del Rivero porque había puesto en marcha un plan para tomar el control del banco.
La «charla» de Brufau y Fainé
En el auto de este jueves, al que ha tenido acceso Efe, el juez hace mención a una conversación que Brufau mantuvo con Fainé, «dada la confluencia de intereses de ambos».
En concreto habla de un documento denominado «Charla», que versa sobre una reunión celebrada en noviembre de 2011 en el domicilio en Galapagar (Madrid) de Rafael Redondo, socio de Villarejo, en la que habrían participado los también investigados Miguel Ángel Fernández Rancaño (exjefe de seguridad de CaixaBank) y Rafael Araujo (exjefe de seguridad de Repsol), entre otros.
El relato de esta reunión «avalaría que, de manera al menos indirecta, Fainé estaba al tanto de la investigación encomendada a Villarejo». Asimismo, García Castellón sostiene que el que fuera director de seguridad de Repsol comunicó a Suárez de Lezo que tenía el contacto de Villarejo, y le propuso la contratación de los servicios de Cenyt.
Del mismo modo, Araujo -según sus propias manifestaciones- «siempre» reportó al entonces secretario general de la multinacional española acerca de la información obtenida, «haciéndole entrega de los informes que recibía de Villarejo»; también aseguró que Suárez de Lezo «le dijo que iba a recibir una llamada de su homónimo en CaixaBank porque en este asunto de la investigación a Luis del Rivero iban a ir de la mano».
Araujo también habría informado a Joaquín Uris, al frente de la dirección corporativa de gestión patrimonial de Repsol, al igual que Juan Amunátegui, quien no solo habría recibido los informes de Cenyt sino que además validó una de las facturas emitidas -el 31 de mayo de 2012- por un importe de 45.000 euros.
Respecto a Antonio Massanell, el magistrado recalca que en la época de los hechos era el superior inmediato del exdirector de seguridad de CaixaBank, Miguel Ángel Fernández Rancaño (ya investigado).
Para el juez «resulta evidente» que fue el propio Massanell quien le informó de que iba a contactar con su homónimo en Repsol para tratar el «encargo», y se remite al testimonio de Fernández Rancaño, que dijo haber dado cuenta a Massanell sobre las reuniones con Cenyt, «acordando un primer pago y que los posteriores se hicieran según se fueran recibiendo informes».
Poco después, el exjefe de la Unidad Central de Apoyo Operativo (UCAO) y hombre de máxima confianza de Villarejo, Enrique García Castaño, alias «El Gordo», se habría puesto en contacto con el exjefe de seguridad de la constructora, Rodrigo Álvarez, para ofrecer los servicios de Cenyt, empresa del excomisario.
Repsol hizo un encargo puntual a Cenyt
Junto al denominado «proyecto Wine», desarrollado entre 2011 y 2012, consta que Repsol contrató posteriormente a Cenyt «de manera autónoma», esto es, sin la intervención de CaixaBank, en 2014.
Se trató de un encargo puntual, relacionado con la prueba de la asistencia a un evento deportivo de un consejero de Repsol, que se ausentó de una reunión de la comisión de la que formaba parte, programada para ese mismo día.
El informe del servicio de «compliance» de la petrolera sostiene que la iniciativa del encargo debió de partir de Suárez de Lezo, mientras que la decisión de encomendar el encargo a la empresa de Villarejo, de Araujo.
Por todo ello, Cenyt emitió a Repsol una factura por importe de 24.200 euros en concepto de «servicio de análisis de información y seguridad».