Fabricantes y súpers envían sus lobbies a Sánchez por la venta a pérdidas
Los fabricantes de alimentos y supermercados se alistan para abordar con el nuevo gobierno el conflicto por la venta a pérdidas de la leche y el aceite
Los grandes fabricantes de alimentos y bebidas del país, por un lado, y los supermercados, por el otro, preparan sus respectivos lobbies para abordar al nuevo gobierno de Pedro Sánchez por el choque que mantienen con la venta a pérdida.
Los fabricantes de alimentos básicos han llamado a sus patronales para que acuerden cuanto antes una reunión con los nuevos responsables del ministerio de Agricultura, Medio Ambiente y Alimentación, al mando de Luis Planas.
Los grandes productores del país llevan meses preocupados por el encaje legal que podría tener la venta a pérdida, una práctica comercial prohibida de forma tajante por la ley minorista española pero que queda permitida, en algunos supuestos, por la directiva europea. El Tribunal de Justicia Europeo también falló en junio del año pasado en contra de la normativa española que prohíbe esta práctica comercial.
Los grandes fabricantes presionan para una reunión con el equipo de Pedro Sánchez
Los lobbies de la industria habían presionado al gobierno de Mariano Rajoy para que eliminara por completo cualquier prohibición a esta práctica en la ley española. A favor de una mayor libertad trabaja la patronal de supermercados Asedas, comandada por Mercadona y DIA, que también ha criticado la normativa europea.
Carrera por un hueco en la agenda
Los fabricantes de leche y aceite, los más perjudicados por el derribo de precios de los grandes supermercados, han pedido reuniones con el gobierno.
Una de las mayores patronales del sector, la Federación Española de la Industria de la Alimentación y Bebidas, FIAB, que reúne a las grandes asociaciones de la industria alimentaria española, ha confirmado a este diario que esperan una reunión con los nuevos responsables del gobierno de Pedro Sánchez para tratar este problema.
El director general de FIAB, Mauricio García De Quevedo, explicó a este diario que intentarán pautar una reunión con los responsables del nuevo gobierno para tratar este problema que “genera una clara pérdida de valor en la cadena de la industria alimentaria”.
La patronal ha solicitado mayores sanciones comerciales contra estas prácticas y tiene la esperanza de que el nuevo gobierno de Pedro Sánchez trabaje en esa dirección. No hubo mucho éxito con el gobierno anterior, que incluso se mostró dispuesto a eliminar cualquier prohibición de la venta a pérdidas de la legislación española, según comentan fuentes del sector.
En el extremo contrario del conflicto, la patronal de Mercadona y DIA también podría dar pasos pero justo en dirección opuesta. Asedas también espera las nuevas designaciones para abordar al nuevo equipo de Sánchez, que no había sido nombrado hasta el viernes pasado.
Asedas no quiso hacer comentarios sobre sus intenciones de reunirse con el próximo gobierno. La patronal dirigida por las cadenas de supermercados asegura que no hace pública su agenda ni sus reuniones con representantes del gobierno.