EY y la ley ‘antiCovid’ salvan al FC Barcelona del concurso de acreedores
Con un patrimonio neto negativo de 451 millones de euros, el conjunto azulgrana convenció a su auditor para que le mantenga como empresa en funcionamiento
Con una deuda que duplica ampliamente los ingresos y unas pérdidas de prácticamente 500 millones de euros, buena parte del tejido empresarial español estaría camino de los juzgados mercantiles con un concurso de acreedores en la mano. El Futbol Club Barcelona ha logrado evitarlo gracias a dos aliados: su auditor y la moratoria concursal impulsada por el Gobierno en su batería de medidas contra el coronavirus.
Una semana después del adiós de Lionel Messi, el presidente del conjunto catalán, Joan Laporta, dio a conocer nuevos detalles de la crisis económica que asola la entidad. Golpeado por el propio coronavirus y la gestión de la junta directiva de Josep Maria Bartomeu, el conjunto catalán arrastra una deuda que ya alcanza los 1.350 millones de euros, un patrimonio neto negativo de 451 millones de euros y unas pérdidas de 481 millones de euros.
Con las cifras en la mano, el club debería haberse visto obligado a presentar concurso de acreedores, según la ley de Sociedades de Capital. Sin embargo, la entidad logró convencer al auditor de sus cuentas, EY, para evitar el concurso y continuar como empresa en funcionamiento gracias «al plan estratégico presentado», explicó el directivo.
Si bien es imposible desligar la crisis azulgrana de la pandemia, las medidas impulsadas por el Gobierno le protegen también del concurso. El Real Decreto Ley 5/2021 prorrogó la moratoria concursal hasta el 31 de diciembre de 2021, por lo que los acreedores no pueden instar el concurso de acreedores hasta final de año. Un colchón de cuatro meses que, por el momento, le servirá para refinanciar la deuda gracias a un préstamo de 590 millones otorgado por Goldman Sachs.
Queda por ver si con la entrada de 2022 el Ejecutivo volverá a aplazar el final del blindaje y si con el adiós de la norma alguno de sus acreedores solicitará el concurso en caso de impagos.
Laporta augura varios ejercicios complicados a nivel económico: «la situación es dramática»
Lo que es seguro es que con la entrada del nuevo ejercicio la crisis todavía seguirá vigente. Laporta auguró varios ejercicios complicados a nivel económico, aunque confió en sanear los balances en dos años. Cuenta con el oxígeno otorgado por Goldman Sachs para aplazar los pagos de una deuda bruta de 1.350 millones de euros.
El Barcelona debe hacer frente a 673 millones con la banca, pero también a 389 millones de euros con sus futbolistas, 90 millones repartidos en varios litigios que se consideran perdidos, 79 millones por el cobro avanzado de los derechos de televisión y otros 56 millones por partidas del Espai Barça.
El Barça tiene un patrimonio neto de -451 millones
Durante la comparecencia, el dirigente desgranó los principales números de los balances de la entidad. El Barça tiene ahora mismo un patrimonio neto negativo de 451 millones y un fondo de maniobra también de -551 millones. El club depreció el valor de su plantilla en 138 millones de euros y busca una rebaja salarial de aproximadamente 200 millones de euros tras el acuerdo ya alcanzado con el jugador Gerard Piqué. El resto de capitanes se espera que sean los siguientes en adaptar sus condiciones.
Así, el agujero en la campaña 2020-2021 fueron de 481 millones de euros. Los ingresos fueron apenas de 631 millones de euros por unos gastos de 1.136 millones de euros. Laporta aseguró que solamente 91 millones de euros de las pérdidas fueron motivados por el coronavirus, que restó 217 millones a la cifra de negocios pero también implicó ahorros por 126 millones.
El plan de Laporta: sanear la entidad en dos años
A pesar de admitir que el club se encuentra en una “situación dramática”, Laporta quiso destacar los indicios para mostrarse optimista. “La firma del crédito con Goldman Sachs, el interés de 17 empresas por Barça Studios o las tiendas y los acercamientos de cinco marcas para patrocinar la camiseta nos demuestran que la situación es transitoria”, señaló. En dos años aspira a que las finanzas de la entidad estén saneadas.
Tras presentar un nuevo plan estratégico a los acreedores y a su auditor, la directiva descarta tener que cambiar el modelo de propiedad del Barcelona. Si en las últimas semanas se había vuelto a rumorear la posibilidad de que el Barça se convirtiese en una sociedad anónima y dejase de ser de sus socios, Laporta espantó este lunes la posibilidad.