Eroski logra el ‘sí’de la banca a su refinanciación
Eroski formaliza con la banca los contratos de reestructuración de su deuda y obtiene oxígeno hasta 2024
Eroski informó este martes del acuerdo de refinanciación al que llegó con las entidades financieras, tras acogerse a los términos y condiciones acordados en marzo con sus principales acreedores. El acuerdo entrará en vigor el 31 de julio y el respaldo de la banca da oxígeno a la cadena de supermercados vasca hasta 2024. Los contratos cubren el 95,57% de la deuda financiera del grupo.
El presidente del grupo, Agustín Markaide, dijo que “la confianza de las entidades financieras en nuestro proyecto nos permite afrontar los retos definidos en nuestro plan de negocio con las necesidades financieras cubiertas. Como consecuencia, al final del periodo, dispondremos de un nivel de endeudamiento normalizado en relación con la generación de fondos recurrente».
A finales de junio, Eroski puso en venta una cuarentena de filiales para cumplir con la banca, y en julio hizo lo mismo con una veintena de hipermercados. Era la primera parte del proceso para amortizar los 455 millones de euros para refinanciar una deuda de 1.542 millones y poder seguir operando con su modelo cooperativista.
«Según lo previsto en el acuerdo alcanzado en marzo entre Eroski y las principales entidades, el acuerdo será sometido al procedimiento de homologación judicial para dotar de mayor seguridad jurídica a su contenido», dice el comunicado enviado este martes.
Las entidades asumen las condiciones del acuerdo con Eroski
Los cinco bancos que refinanciarán a Eroski tenían en sus manos el 77% de la deuda de la compañía vasca, y el 23% restante se repartía entre 10 entidades más. La mayoría de estas entidades asumieron las condiciones del acuerdo alcanzado en marzo, que ponía como límite el 31 de julio para llegar a un acuerdo definitivo.
Es la segunda refinanciación de Eroski en menos de un lustro. En enero de 2015 tuvo que llegar a un acuerdo con los acreedores que tenían el 95% de su deuda de 2.142 millones de euros, un proceso que se extendió durante más de seis meses hasta que un juzgado obligó a las entidades rebeldes a aceptar el pacto.
Esta vez, el grupo de distribución cumplió con todos los compromisos del acuerdo anterior. Su amortización de deuda alcanza casi los 1.800 millones de euros desde 2010. Este acuerdo no incluye la obligación de realizar desinversiones, tal y como se recogía en el preacuerdo alcanzado en marzo.