Ericsson echa al gabinete que apadrinó el hermano de Montoro
La compañía sueca deja de llamar al despacho fundado por Cristóbal Montoro tras una denuncia de los sindicatos por “incompatibilidades éticas”
El fabricante de tecnología Ericsson ha decidido prescindir de Equipo Económico, la consultora fundada por el ministro de Hacienda Cristóbal Montoro y que había asesorado a la empresa en los anteriores Expedientes de Regulación de Empleo. Equipo Económico habia participado en la elaboración de la memoria económica de los dos últimos ERE de Ericsson en 2016 y 2014.
Ericsson, que ha presentado cuatro expedientes de despidos masivos en apenas cinco años, había confiado hasta ahora en Equipo Económico y Sagardoy los proyectos para justificar ante la administración pública la reducción de plantilla.
Pero este año, una investigación judicial enturbió la relación comercial entre el fabricante de telefonía y el despacho fundado por Montoro. El tercer ejecutivo de la compañía, Francisco Piedras Camacho, que había sido el responsable de elaborar los documentos para justificar los ERE y que también había formado parte del ministerio de Hacienda bajo los mandos de Cristóbal Montoro, ha tenido que presentarse en los juzgados para declarar en la investigación de un presunto caso de corrupción.
A raíz del caso, un grupo de trabajadores elevó una queja ante la sede central de Ericsson en Suecia por considerar que el despacho de Equipo Económico no debía ser contratado por Ericsson, ya que habían surgido dudas sobre si la consultora había incumplido el código ético que Ericsson exige a sus proveedores.
“Denunciamos a Equipo Económico justo antes del ERE y llevamos el caso a la sede central por considerar que la compañía vulneraba el código ético de Ericsson. El responsable que llevaba el caso de los ERE, Francisco Piedras, está siendo investigado por un presunto caso de corrupción”, explicó a este diario Santiago Sánchez, portavoz del Sindicato de Trabajadores de Telecomunicaciones, el mayoritario en la filial española de Ericsson.
Piedras ha tenido que declarar como investigado esta semana en los tribunales por una querella presentada por la Fiscalía Anticorrupción por prevaricación y malversación de caudales públicos por un contrato del Consejo Superior de Cámaras de Comercio que benefició a la compañía española y que no fue sacado a concurso público.
La consultora, fundada en 2006 bajo el nombre de Montoro y Asociados, dio entrada a Ricardo Montoro, hermano del ministro, como accionista en 2009 cuando Cristóbal asumió la portavocía del PP en el Congreso. En ese momento, se produjo el cambio de nombre a Equipo Económico. La consultora asesoró a Coca-Cola y Unidad Editorial, editora del diario El Mundo, en la elaboración de sus ERE.
Fin de la relación
Sagardoy, que trabajaba en conjunto en la elaboración de los documentos para acreditar los ERE de Ericsson ante la administración, defendió siempre el trabajo de Equipo Económico frente las quejas de los trabajadores.
El caso llegó a Suecia, donde fue estudiado por las oficinas centrales. Acto seguido, Ericsson excluyó a Equipo Económico de los trámites para preparar el ERE que se aplicará en breve y que afectará a 340 trabajadores. La empresa española ha sido sustituida por Itasu, la consultora que asesora en procesos de despidos y ajustes a la siderúrgica Sidenor y al call center Konecta.
Ericsson no ha respondido sobre los motivos de la exclusión de Equipo Económico de estos trabajos. El fabricante tecnológico se ha limitado a explicar que el actual ERE se aplica en un contexto de disminución de mercado y de disminución de los beneficios de la compañía.
La querella contra Equipo Económico implica a Ricardo Montoro, hermano del ministro de Hacienda, a Ricardo Martínez Rico, presidente ejecutivo y ex secretario de Estado y a otros dos socios directores del bufete: Salvador Ruiz y Manuel de Vicente-Tutor, antiguos altos cargos del ministerio.
La consultora de los Montoro no atraviesa su mejor momento. Equipo Económico facturó 1,6 millones de euros en 2016 frente a los 4,3 millones obtenidos en 2015. El beneficio de la compañía apenas alcanzó los 15.000 euros el año pasado, cuatro veces menos que en 2015.