Seis preguntas que jamás deberían hacerte en una entrevista de trabajo

Una entrevista laboral es para conocerse. Se trata que el reclutador -sea el director de la compañía, un gerente de área o el responsable de recursos humanos- sepa quién es el aspirante que busca ser contratado; y esa persona que busca un trabajo también está interesado en tener información sobre la compañía y el puesto vacante.

Pero al momento de realizar la entrevista no todo vale.

Los tiempos están cambiando y muchas preguntas que décadas atrás se podían considerar normales actualmente no solo están mal vistas, sino que muchas pueden ser ilegales.

Además, las compañías tienen en cuenta que con los cambios de las leyes sobre protección de datos ha cambiado la forma en que se recoge la información personal y laboral de los candidatos.

De hecho, la compañía tiene que pedir autorización para guardar el CV, y no puede conservarlo más de dos años.

Estas son algunas de las preguntas que no tienen cabida en una entrevista laboral

¿Cuál es tu ideología (o etnia u orientaciones sexuales)?

En la entrevista hay preguntas que no tendrían cabida, y menos si no guarda relación con el puesto a trabajar.

En una entrevista es ilegal preguntar por la religión, la orientación sexual o ideológica del aspirante

Por ejemplo, no se puede aceptar que pregunten sobre la orientación sexual, la etnia o la ideología política. Si por algún motivo la empresa quiere realizar consultas de. Este tipo debería presentar un escrito para dar el consentimiento previo y justificar las razones.

¿Cuál es tu edad?

Mucha gente ya suele incluir su fecha de nacimiento en el CV y casi no es necesario preguntarlo para el reclutador.

Pero nunca falta quien en la entrevista quiera averiguar la edad, un dato que no debería ser relevante para ocupar un puesto de trabajo.

La excepción es que la oferta de trabajo lo haya explicitado en el anuncio, de lo contrario se estaría en un caso de discriminación.

¿Piensas tener hijos? (o casarte)

La información sobre la vida personal es irrelevante en un proceso de selección. No se puede discriminar de un puesto laboral si una persona quiere casarse o si una mujer decide tener niños más adelante.

¿Cuál es tu nacionalidad?

Si una persona tiene el permiso legal para trabajar y habla fluidamente el idioma no importa donde ha nacido. En estos casos, si uno proviene de un país que no es castellanoparlante, se puede dar vuelta a la situación respondiendo que conoce varios idiomas y que sabe cómo adaptarse a los cambios.

¿Estás afiliado a algún sindicato?

Se comprende que los reclutadores busquen evitar la contratación de personas conflictivas, pero estar afiliado a algún sindicato no significa que uno llegue a la empresa para poner en marcha la revolución obrera.

En caso de ser así, hay que responder la verdad y sin juicios valorativos, porque ese no puede ser un motivo de discriminación laboral.

¿Tiene buena salud? (o cuál es tu peso o altura)

A menos que sea un trabajo que requiera de unas condiciones físicas óptimas (como puede ser entrenador personal) las preguntas sobre la salud no tienen lugar; como tampoco saber el peso o la altura (excepto en puestos como tripulantes de cabina).