Endesa desmantelará la central térmica de Almería el 16 de diciembre
La compañía energética prepara un plan para la generación de empleo y una inversión en renovables para compensar el impacto del cierre tras 36 años de explotación
Endesa ya ha puesto fecha para el fin de la central térmica del Litoral de Carboneras, en Almería. La compañía energética desconectará definitivamente las instalaciones el próximo 16 de diciembre para acabar con 36 años de funcionamiento. Es un paso más en los retos marcados en sus objetivos de descarbonización que eliminarán de su negocio estas explotaciones.
La empresa presidida por José Bogas iniciará en ocho días el proceso de desmantelamiento de la central que hasta ahora daba trabajo a 120 personas en la provincia andaluza. Aunque la dirección ya ha iniciado un plan de formación y empleo para reubicar a los empleados que no se jubilen a finales de año.
Endesa se desprenderá así de una de sus térmicas de referencia de las últimas cuatro décadas. Durante su vida útil llegó a producir hasta 180.000 gigavatios por hora de energía. Es decir, el consumo equivalente a toda Andalucía durante cuatro años y medio.
Carboneras continuará el camino que ya habían adelantado otras centrales que se pusieron en marcha en la década de los años 80 como la de Andorra (Teruel) o Compostilla II (León), que ya despertaron fuertes críticas entre los trabajadores por las dificultades para lograr un plan de transición que garantizase el empleo en las áreas rurales que viven de este sector.
Este nuevo paso se enmarca dentro de la fase de aceleración que la compañía ha iniciado para dejar atrás todo su negocio del gas, lo que incluye a las centrales térmicas que utilizan este combustible para generar su energía. El objetivo es que a partir de 2040 ya no se comercialice ningún servicio que utilice esta fuente.
Endesa prepara inversiones en renovables para paliar el fin de la térmica
Endesa ha ideado una fórmula para compensar el impacto que tendrá en el mercado laboral el cierre de Carboneras con una apuesta por la energía renovable. La compañía energética ha anunciado ya la instalación de una granja de paneles solares con una capacidad de 1.200 megavatios de potencia para generar electricidad verde.
Paralelamente, la empresa ha lanzado un concurso internacional para la búsqueda de proyectos empresariales que dinamicen los terrenos de la central y de su terminal portuaria una vez que finalice el desmantelamiento. Ya han recibido 14 propuestas, que están siendo analizadas por la comisión de expertos conjuntamente con el Ministerio de Transición Ecológica.
La zona de Carboneras se trata de un enclave estratégico debido a las inversiones que Endesa ha realizado ahí durante las últimas décadas. El área cuanta con 297.000 metros cuadrados de extensión, acceso a la red eléctrica y de agua, así como un enlace rápido con la autovía.
La zona está ubicado a 59 kilómetros del aeropuerto y Endesa cuenta además con una concesión hasta el año 2037 para explotar la central portuaria. Dos condiciones que quieren explotar para intentar atraer proyectos destinados a la logística hasta las inmediaciones de la vieja central térmica cuando quede desactivada.