Estas son las empresas españolas que siguen en Rusia
La catalana Borges o la compañía de equipamiento de piscinas Fluidra, que cotiza en el Ibex-35, son algunas de ellas, según un estudio de la Universidad de Yale
Tras la intervención del pasado martes del presidente ucraniano Volodímir Zelenski en el Congreso de los Diputados y su llamada de atención a algunas compañías españolas por continuar su actividad en Rusia, surge la siguiente pregunta: ¿Qué empresas son concretamente las que siguen vendiendo en Rusia y no han modificado nada pese a la invasión del Kremlin a su país vecino? ¿Realmente las empresas que señaló el líder ucraniano continúan como si nada en Rusia?
Según un ranking de la estadounidense Universidad de Yale serían cuatro las compañías que no han tomado medidas ante la guerra de Ucrania y Rusia: Lladró, compañía valenciana que se dedica a las figuras y esculturas de porcelana, Borges, empresa catalana que centra su negocio en la comercialización de productos de alimentación mediterránea, Grupo Antolín, multinacional industrial que diseña y fabrica componentes y módulos para el interior del automóvil, y Fluidra, compañía de equipamiento y soluciones conectadas para piscinas y wellness que cotiza en el Íbex-35.
Sin embargo, hay algunas más, que también según la Universidad de Yale, no han anunciado públicamente que hayan cesado su actividad en el país dirigido por Vladimir Putin.
Estas serían Acerinox, el Grupo Fuertes y Maxam. Pero volviendo a las que sin duda siguen operando en Rusia, como es el caso del Grupo Antolin, se puede destacar que esta empresa aún no ha paralizado sus dos fábricas en el país, situadas en San Petersburgo y Nizhny Nóvgorod.
Entre ambas, dan trabajo a 149 personas y el mercado ruso representa menos del 1% de sus ventas mundiales, aunque declararon que creció a una tasa interanual del 9% en 2021. Sin embargo, por su parte la empresa fabricante de figuras y productos de porcelana Lladró ha desmentido estas informaciones y ha asegurado que desde la invasión de Rusia a Ucrania han cesado el servicio y envío de mercancías a sus clientes rusos.
Lladró desmiente estas acusaciones
«No hemos aceptado ni servido ningún pedido de Rusia«, ha reiterado la compañía en un comunicado. En este sentido, han aclarado, que no son los propietarios de los siete negocios de venta en el país que preside Vladimir Putin.
«El sistema de distribución en ese país es a través de franquicias y puntos de venta multimarca: tiendas que son propiedad de terceros en su totalidad», han apuntado desde la compañía. En los mismos términos se ha defendido Porcelanosa, que fue directamente señalada por el presidente ucraniano durante su intervención parlamentaria.
Porcelanosa también niega estas informaciones
De hecho ayer mismo se reunieron en Madrid los directivos del grupo Porcelanosa con el embajador de Ucrania en España para demostrarle con datos que la alusión que hizo el martes Zelenski en el Congreso de los Diputados es completamente errónea. «No operamos propiamente en Rusia porque no tenemos filial abierta en ese país», aclaraba el vicepresidente de Porcelanosa, Silvestre Segarra.
Así, el grupo empresarial español trabaja en Rusia con «agentes multimarca», empresas que habrían comprado productos de Porcelanosa antes de la guerra y que se dedican a vender dicho stock en el mercado ruso. De esta manera, Segarra aseguraba que la empresa canceló sus operaciones comerciales en Rusia desde antes del inicio de la invasión: «Nosotros no hemos cogido ningún pedido desde principios de febrero».
Maxam guarda silencio
Por el contrario, Maxam, el gigante español de los explosivos, guarda silencio desde que el martes Zelenski señalase también a esta empresa en su discurso al pedir que las compañías españolas abandonen sus negocios en Rusia. Como ya se ha mencionado, las otras aludidas, Porcelanosa y la patronal de la industria española de bienes de equipo, han salido rápidamente a desvincularse de Rusia.
Pero no Maxam. El llamamiento del líder ucranio ha causado evidente incomodidad en la multinacional española.
De hecho, el mismo martes, preguntada por sus actividades en Rusia, pidió solicitar la información por correo electrónico. “Estamos en ello”, indicó el miércoles un portavoz.