El tirón del plan Pive 6 dispara las ventas fuera de plazo
En los dos últimos días de octubre se vendió el 20% del total pese a que el plan finalizó el 28 del mismo mes
El plan Pive ha revivido el sector de la automoción en España. Las ayudas a la compra de vehículos ha permitido que octubre vuelva a ser un mes excepcional y que registrara un crecimiento interanual de las matriculaciones del 26,4%. Un poco más de ese 23% que auguraba el sector.
Muchos consumidores se han lanzado a los concesionarios para renovar su coche apurando los últimos días de un plan que ha agotado el presupuesto de 175 millones de euros antes de que acabara el año. Aunque algunos no contarían con que los incentivos finalizaran antes de final de mes.
Durante los dos últimos días de octubre –30 y 31– se matricularon 15.812 coches, “una cifra excepcional que supone un peso del 20% del total del mes, y el propio día 31 se matricularon 9.446 unidades, el 12,4% del mes y ello es debido a la finalización del plan Pive 6, que se cerró el día 28”, desvela la asociación nacional de importadores de automóviles, camiones, autobuses y motocicletas (Aniacam). Fuentes de la misma organización puntualizan que el tirón del propio plan ha permitido disparar las ventas de última hora y se han adelantado 4.000 matriculaciones que de otra forma hubieran contabilizado en noviembre.
30.000 matriculaciones menos
Los datos son buenos, pero no suficientes. Así lo entienden representantes del sector como el presidente de Aniacam, Germán López. Sin el plan Pive vigente hasta final de año, las ventas no llegarán a esa ansiada cifra de 850.000 unidades vendidas –el 17% más que hace un año– y se recortaría la previsión en 30.000 unidades menos de lo estimado.
“El gran problema que supone la finalización del Pive 6 es que, puesto que se ha anunciado que en 2015 se pondrá en marcha el Pive 7, durante los dos meses que faltan para la finalización del año, es muy probable que se ralenticen las ventas ya que los clientes preferirán esperar a enero”, sostiene López. Sin la prórroga de los incentivos, el sector teme enterrar los buenos resultados cosechados en los últimos meses y tener que afrontar un parón en las matriculaciones y, con ello, una caída del mercado.
Crecimiento y confianza
El presidente de la asociación de importadores de vehículos sostiene que el esfuerzo del Gobierno durante estos dos meses, –siendo diciembre uno de los más importantes del sector– conseguiría un aumento en la recaudación vía IVA e impuestos. Además, se alcanzaría un objetivo de ventas que, según López, “transmitir una idea de recuperación económica y una mayor confianza del consumidor”.
Si todo sigue según lo previsto, el séptimo plan Pive arrancará en dos meses con una partida similar a la anterior –175 millones– con el propósito de seguir empujando a un sector que, por la crisis, rueda a medio gas.