El salvavidas de San José: ingresar en el exterior el triple que en España
La cartera internacional de la primera constructora gallega asciende a 3.164 millones, frente a los 909 del mercado doméstico
Ya está. San José ha conseguido dar un giro de 180 grados al enfoque de su negocio, que vivió tiempos de gloria en España en la época de la burbuja inmobiliaria. Desde que estalló la crisis y explotó la burbuja, la constructora de Jacinto Rey puso pies en polvorosa y aplicó un ambicioso plan de expansión para ganar en el extranjero lo que iba a perder en casa.
En 2009, el 69% de su cartera de negocio estaba en el mercado español. A cierre de 2013 la proporción ha dado un vuelco. Los proyectos en el extranjero suponen el 71% de la cartera de San José. Ascienden a 3.164 millones, según los datos remitidos por la compañía a la CNMV, mientras que el negocio español en cartera apenas alcanza los 909 millones.
El ladrillo, siempre el ladrillo
La cuestión no es baladí para el grupo, que está sufriendo lo indecible para refinanciar una ingente deuda –ronda los 1.600 millones– que asumió para hacerse con la inmobiliaria Parquesol en 2006. Por el momento, las conversaciones con la banca acreedora han quedado aplazadas hasta octubre, a pesar de que Jacinto Rey anunció que el acuerdo se cerraría antes de julio. No fue así. Las entidades, entre las que están Popular, Santander, Barclays o BBVA, tienen dudas sobre la salud de la división inmobiliaria del grupo y no ven más solución que entrar en el capital, canjeando deuda por acciones.
Porque, si bien San José pudo huir de la caída de la construcción en España, la compañía acabó comiéndose el ladrillo. San José Desarrollos Inmobiliarios, la sociedad que aglutina desde hace cuatro años las inversiones en inmuebles del grupo, perdió 157,2 millones en 2013 y presentó un patrimonio neto negativo de 268 millones. Lógicamente, la negociación que debe salvar al grupo, que ha ido aplazando los pagos de la deuda con la complicidad de los acreedores, se complica. La banca confía en la exitosa expansión internacional del grupo, pero acaba espantada cuando mira a la otra cara del negocio.
Los grandes proyectos
Pero al margen del lastre inmobiliario, San José funciona en su área fundacional, la construcción, gracias al proceso de internacionalización. En el último ejercicio, el 46% de su facturación se amasó lejos de España y, por primera vez, los proyectos internacionales en cartera rebasaron a los españoles.
Cuatro grandes contratos acaparan el grueso de la cartera exterior. La compañía se hizo con un contrato de 900 millones de dólares para levantar el hospital Al Ain en Abu Dhabi. Va de la mano en la aventura con la constructora de Dubai Arabtec, que se lleva el 50% del contrato.
También en el emirato se desarrolla el otro gran proyecto de San José, el Louvre de Abu Dhabi, presupuestado en 660 millones de dólares. La compañía gallega participa en la magna obra junto a la propia Arabtec y Oger Abu Dhabi LLC.
Más pequeños, pero enormemente jugosos, son los contratos para la construcción de la sede del Ministerio del Interior de la República del Congo (58 millones) y la rehabilitación de una autopista en India, obra presupuestada en 70 millones. En estos dos proyectos, la compañía de Jacinto Rey se queda con todo el pastel.