El RACC tuvo 2,4 millones de pérdidas en 2010
La entidad de servicios a los automovilistas rebajó su facturación en 20 millones y perdió 40.000 socios
El Real Automòbil Club de Catalunya (RACC) perdió el año 2010 2,4 millones de euros, según los datos que facilitó la entidad a la asamblea de compromisarios celebrada a finales de abril. La crisis ha afectado al club y a sus empresas, de forma que sus ingresos se redujeron en 20 millones de euros respecto a los obtenidos en 2009.
Durante el 2010 el RACC facturó por valor de 425 millones de euros, mientras que el año anterior la cifra obtenida fue de 445 millones. Si se comparan los resultados netos, en 2009 el beneficio obtenido fue de 8,1 millones de euros y el año pasado se registraron pérdidas.
Los resultados se han conseguido después de que la entidad automovilística invirtiese el año pasado 5 millones de euros, de los que el 80% se dedicó a la compra de coches preparados para dar asistencia en carretera y el resto a mejoras en infraestructura informática.
Aproximadamente la mitad de los 2,4 millones de euros que figuran en el balance como números rojos fueron fruto del descenso de asistentes al Circuït de Catalunya de Montmeló. De esta instalación el RACC posee un 18% y durante el último ejercicio el público no cumplió con las expectativas creadas.
La otra parte de las pérdidas está motivada, según la entidad, por el cambio experimentado en el negocio de los seguros. Hasta 2010 esta área era correduria de seguros, mientras que el año pasado se creó una compañía propia, al 50%, con la francesa ACM. Esta operación habría supuesto una penalización desde el punto de vista contable.
Problemas en telefonía
La compañía de telefonía móvil creada por el RACC tampoco ha cumplido los objetivos marcados. Esta sociedad se creó con la ambición de tener en marcha 100.000 líneas en tres años. A finales de 2010, las altas no superaban las 22.000. En la entidad constatan que el mercado de las telecomunicaciones es de difícil penetración. Por ello han reducido su ambición y a finales de 2011 confían llegar a las 32.000 líneas en activo.
El principal activo del RACC, sus socios, tampoco ha crecido. Si a finales de 2019 su cifra era de 1.100.000, a finales de 2010 se habían registrado 45.000 bajas. De cara a los próximos años el objetivo es moverse en una cifra de socios cercana al millón.
La expansión del club en el conjunto de España topa con dificultades en mercados considerados claves como Madrid, donde existen compañías y mutuas que dan servicios de asistencia a niveles parecidos a los de la empresa catalana.
Fuentes del RACC reconocían a Economía Digital que “la morosidad también ha hecho mella en nuestra entidad. Cuando existen dificultades para asumir los pagos de bienes de primera necesidad es normal que se renuncien a servicios considerados de menor entidad”, aseguran.
A pesar de que los resultados del RACC han entrado en pérdidas y algunos de sus proyectos más significativos tienen dificultades para avanzar, sus directivos son optimistas. Recuerdan que ya a principios de 2010 presupuestaron que este ejercicio arrojaría números rojos: concretamente 5,8 millones, con lo que se dan por satisfechos por la evolución que ha seguido la entidad en “esta dura crisis”.
El RACC asegura que en el conjunto de empresas vinculadas a la entidad se mantiene la plantilla, unos 2.000 empleados. No obstante, hace un año se registraron momentos de tensión ante lo que muchos consideraron una reconversión silenciosa. En este sentido, explican que el proceso ha supuesto aligerar los servicios centrales y dar más importancia a las delegaciones territoriales.