El pulso de T-Systems a Google, Microsoft y Dropbox
Multinacionales como Shell y Correos confÃan en el cloud empresarial privado
Facilitar a una pyme la gestión de los contactos o controlar la facturación y las nóminas de una multinacional son solo algunos de los servicios que se pueden obtener a través de una nube o cloud computing privada. En este tipo de servicios se han especializado compañías como T-Systems, que aporta un plus a los que ofrecen empresas como Google Apps, Dropbox y Microsoft.
El cloud empresarial está de moda por ser necesario entre las compañías que quieren salvaguardar su documentación más confidencial, a la vez que buscan mejorar accesibilidad en cualquier momento y desde cualquier lugar. Este servicio, desde la nube, puede ser público o privado, y se espera que genere en 2015 ingresos por valor de 1.000 millones de euros.
Cada vez son más las empresas que apuestan por este modelo de servicio en la red. Y también, las que adaptan a sus compañías aplicaciones on demand, basadas en el sistema de pago por uso, así como soluciones de amalcenamiento en la nube.
Tipología
El modelo público consiste en la computación virtualizada a través de bases de datos y aplicaciones como, por ejemplo, el acceso al correo electrónico entre todos los empleados, al margen de lo amplia que sea y desde el punto en el que opere. Además, no requiere de una inversión monetaria para su implantación –un ejemplo sería el correo de Google–.
El segundo tipo, el privado, consiste en reforzar aspectos que cada vez son más imprescindibles para evitar ataques cibernéticos: la seguridad de que la información esté protegida en la red, la fácil customización del cloud, y la mayor disponibilidad de la información. Los suministra un proveedor, como T-Systems, y pueden ser implementados, usados y controlados por la misma empresa.
Un reto en la Administración Pública
Estos tres aspectos son claves aunque, según el responsable de consultoría y soluciones de ventas de T-Systems Iberia, Santiago Cordero, en dos o tres años competirá con un sistema híbrido. La diferencia entre contratar un sistema público de uno privado también recae en el precio, que puede variar en un 20%.
Pero no sólo las empresas privadas hacen uso de cloud computing, ya que la Administración Pública se ha subido al carro. Eso sí, según Cordero, todavía le queda mucho por hacer. “La base instalada está muy obsoleta”, indica este experto de T-Systems.
Asegura que una modernización del sistema y una adaptación al servicio de la nube para aspectos tan básicos como organizar la paga de las nóminas sería “bastante interesante para el ahorro en la estructura”. La crisis ha hecho mella en la inversión en TICs y servicios de cloud computing, pero, precisamente, podría repercutir de manera muy positiva en su organización y conseguiría en un futuro acercarse a las directrices de austeridad y control del déficit que requieren las administraciones.
Acuerdos con multinacionales
El sistema cloud computing empezó a comercializarse en 2004 –antes conocido como dynamic services–. Desde entonces, T-Systems se ha ido especializando en el ámbito privado, y ha cerrado importantes contratos de outsourcing con multinacionales como la energética Shell y British American Tobacco, así como con la empresa pública de Correos y Telégrafos, con quien firmó un acuerdo por 41 millones en 2011.