El plan de Enric Ticó para que FGC dependa menos de las subvenciones
El presidente de los ferrocarriles catalanes quiere disminuir el dinero público del 20,5% al 15% en cuatro años
Enric Ticó lleva en su bolsillo un papel doblado cortado a mano. Sobre él, consulta un gráfico que contiene los números de explotación de los Ferrocarriles de la Generalitat de Catalunya (FGC). “No los recuerdo todos de memoria”, explica. Pero hay uno que sí, el de su facturación anual: 100 millones de euros.
Ticó habla con entusiasmo de su plan por aumentar la partida que en la empresa denominan ingresos no ferroviarios, es decir, los recursos que entran por conceptos diferentes a la compra de billetes. “En Japón, estos ingresos suponen el 30% del total. En Europa, el 8%. Podemos lograr esta cifra en cuatro años para no depender tanto del dinero público”, explica un entusiasta Enric Ticó que quiere disminuir las ayudas publicas a esta red de transporte del 20,5% a 15% en los próximos cuatro años.
3,88 millones en publicidad
Desde el cambio de compañía publicitaria hace algo más de un año, cuando JC Decaux dejó la explotación de las estaciones, y con la entrada de las empresas Main y Clear Channel, la facturación publicitaria ha pasado de 2 millones de euros a 3,88 millones de euros, según explicó el presidente. También se han renegociado los precios hacia el alza de su red de fibra óptica a las operadoras de telefonía que, como Orange, utilizan la infraestructura.
Pero una de las medidas que puede reportar un ingreso rápido –si logra burlar las múltiples dificultades económicas– es la construcción de centros comerciales en los terrenos que los Ferrocarriles de la Generalitat quiere aprovechar con rendimientos urbanísticos. “Estamos trabajando en dos planeamientos urbanísticos para la construcción de zonas comerciales en Martorell y Sant Boi”, explica Ticó, que también prevé internacionalizar la empresa con inversiones productivas en el extranjero.
Esta semana, Ticó asistió a la presentación de un supermercado virtual de Sorli Discau en el pasillo de la estación de Sarrià (Barcelona) que generará unos ingresos adicionales a la compañía aunque su cuantía no fue desvelada. Además, ha subastado también dos coches oficiales de los antiguos gestores.
Recortes de gastos
En paralelo, Ticó no oculta su plan menos amable: el de recorte de gastos. Tras haber eliminado el servicio nocturno ininterrumpido los sábados por la baja afluencia de viajeros, los ferrocarriles han recortado o eliminado servicios en algunas rutas como la del funicular de Gelida. “Para un kilómetro de funicular, decidimos instalar unos autobuses que son mucho más baratos”, explica Ticó.
Este verano comenzarán también los recortes de frecuencia en las llamadas horas valle (de escasa afluencia) en el Baix Llobregat. La medida supondrá un ahorro de 2 millones de euros.